Los ingresos brasileños obtenidos este año por las exportaciones de frutas frescas podrían superar los adquiridos en 2021 (1,1 mil millones de dólares), alcanzando así un nuevo récord, según datos de la Secretaría de Comercio Exterior (Secex). En términos de volumen, los envíos parciales en 2023 están por debajo del nivel histórico de 2021.

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Hortifruti Brasil, publicación del Centro de Estudios Avanzados en Economía Aplicada, CEPEA, de Esalq/USP, evaluó el desempeño de los envíos de las 10 principales frutas frescas más vendidas en volumen (mango, melón, uvas, limas/limones, sandía, papaya, aguacate, manzana, plátano y naranja), y está claro que la fruticultura en Brasil ha ido ampliando su importancia internacional.

Investigadores de Cepea indican que, en 2023, los ingresos récord están directamente relacionados con el aumento del precio promedio pagado (en dólares) por las frutas, lo que, a su vez, se debe al clima favorable en Brasil, mejores condiciones logísticas y, principalmente, a menos competencia externa.

Es importante recordar que Brasil, siendo uno de los pocos países capaces de producir durante todo el año, ofrece fruta en períodos en que otros proveedores tienen problemas de producción y/o están fuera de temporada.

Dentro de las razones por las que el sector frutícola nacional no exporta más. Además de que gran parte de la producción nacional se consume internamente, muchos productores aún desconocen el proceso de venta al mercado externo, creyendo que se trata de un mercado exigente, burocrático y accesible sólo a los grandes agricultores, lo que también limita las exportaciones.