Uno de los principales desafíos que enfrenta la fruticultura en el Valle del Cauca en Colombia es la baja disponibilidad de potasio en algunos de sus suelos. Sin embargo, el desequilibrio nutricional no impidió que los productores sembraran 1.538 hectáreas con uva, considerando que es uno de los frutales más sensibles a la deficiencia de potasio.

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A raíz de lo anterior, y para mejorar la producción de dicha fruta, un grupo de investigadores de la Universidad Nacional de Colombia (UN) encontró la dosis adecuada de sulfato de potasio, ofreciendo así una solución a la actual problemática del sector.

Y es que la deficiencia de potasio se manifiesta claramente en los bajos contenidos foliares, la baja productividad y calidad de las cosechas, razón por la que Sara Mejía de Tafur, profesora de la UN en Palmira destacó la importancia de determinar el efecto de dicho mineral.

“Es importante identificar el efecto que están teniendo las aplicaciones del elemento en estos suelos, si son suficientes las dosis aplicadas, cómo influye en el tejido foliar de la vid y si realmente contribuye a mejorar el rendimiento y la calidad de la uva”, comentó a Agencia de Noticias UN.

De este modo, la profesora junto a su colega Juan Carlos Menjivar, reclutaron al magíster en Ciencias Agropecuarias de la UN, Oswaldo Puerto Guerrero, para evaluar el comportamiento del potasio en un vertisol* de la zona plana del Valle del Cauca.

De acuerdo a Agencia de Noticias UN, la investigación consistió en cuatro tratamientos donde se agregaron 0, 100, 150 y 225 gramos de sulfato de potasio por planta, con tres repeticiones. Asimismo, realizaron la prueba Duncan para comparar los análisis gráficos, medias y la correlación entre las variables.

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Cabe señalar que, previo al tratamiento, los investigadores realizaron análisis de mineralogía de arcillas, y fisicoquímico del suelo y agua de riego, por lo que, durante el proceso, monitorearon el potasio durante la floración y envero de la uva Isabella.

“Se encontró que la adición de sulfato de potasio en dosis entre 100 y 225 gr/planta mejora la disponibilidad absoluta y relativa de este elemento, respecto a otros como el calcio y el magnesio, propiciando el aumento en el tejido foliar y una marcada tendencia a incrementar el rendimiento”, indicó Mejía de Tafur, líder del proyecto.

De este modo, lo que el proyecto hizo fue enriquecer la disponibilidad de potasio en este tipo de suelo específico, pese al marcado desequilibrio nutricional causado por la presencia de arcillas, el lento movimiento de agua en el suelo y el alto contenido de magnesio soluble.

 “Además, la aplicación de sulfato de potasio aumentó el número de racimos de calidad comercial, aunque no influyó en la calidad referente a las dosis y condiciones usadas en el presente ensayo”, agregó la docente.

De acuerdo a información del proyecto, la viticultura en producción de uva de mesa y uva Isabella se ha practicado en el Valle del Cauca desde hace más de 60 años, aprovechando que el clima permite cultivar en cualquier fecha, dando como resultado dos cosechas anuales.

 (*) Suelo generalmente negro donde hay un alto contenido de arcilla expansiva conocida como montmorillonita que forma profundas grietas en las estaciones secas, o en años.

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