Las protestas y bloqueos en puertos y carreteras que vive Colombia han generado diversos impactos en las inversiones del país, las industrias y el transporte de alimentos.

La Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC) reveló en un informe que se han perdido alrededor de 16.376 toneladas de alimentos por las dificultades de movilidad en 29 de los 32 departamentos del país.

De acuerdo con medios locales “las frutas, hortalizas, el aguacate hass, el café, la caña de azúcar, la producción y transformación de leche, la avicultura, la piscicultura y la porcicultura han sido los sectores impactados por la actual coyuntura del país”.

El documento de SAC detalló que los mayores impactos se registran en departamentos como Caldas con 3.243 toneladas pérdidas; Huila con 2.436 toneladas; Quindío con 2.133 toneladas; Boyacá con 1.509 y Risaralda con 1.119.

Jorge Bedoya presidente de SAC señaló que “los bloqueos están generando un atentado contra la seguridad alimentaria, entonces si en Colombia se quiere erradicar el hambre una de las primeras cosas que deben ser viables es la producción de alimentos, pero estás acciones vulneran la posibilidad de producir comida”.

Jorge Bedoya enfatizó que el sector agropecuario también es relevante en la generación de empleo, se calcula que hay alrededor de 12 millones de habitantes en el campo colombiano.

“En sectores como panela estamos hablando de 350 mil familias, 450 mil familias cafeteras, 52 mil familias cacaoteras, 29 mil familias paperas, 165 mil empleos del sector bananero, 651 mil empleos que generan nuestros productores del sector porcícola, piscícola y avícola, 140 mil empleos que genera el sector floricultor, los más de 1,3 millones de productores que reciben sus ingresos por cultivos de frutas y hortalizas, entre otros”, explicó Bedoya.

“Inminente necesidad de levantar los bloqueos"

Según información de  la agencia Anadolu, el defensor del Pueblo de Colombia, Carlos Camargo, advirtió que existe una “inminente necesidad de levantar los bloqueos  porque si continúan, podrían provocar un colapso de la seguridad alimentaria”.

“La protección de los derechos humanos es una prioridad y eso implica garantizar la seguridad alimentaria, los suministros, los servicios médicos y el orden público”, dijo Camargo.

Casi 300.000 puestos de trabajo se han perdido en los primeros 26 días de protestas, según el gremio de comerciantes del país, Fenalco.

Pablo Arbeláez, Gerente de Operaciones de Vive Agro indicó que tuvo que despedir a más de la mitad de sus 300 empleados porque la empresa ya no podía pagarles.

“La pandemia envió nuestro negocio a cuidados intensivos y ahora las protestas nos han privado de oxígeno. Los bloqueos de carreteras nos obligaron a cerrar la planta por primera vez en nueve años”, afirmó Arbeláez y agregó que ha pasado casi un mes desde que la empresa no ha podido abastecer a muchos de sus clientes en todo el país.

Arbeláez aseguró que “la mayoría de los pequeños y medianos productores que abastecen a Vive Agro de frutas y verduras han tenido que botar los productos que no han llegado a su destino por los bloqueos”.

22,2 % de las empresas en Colombia suspendieron su operación

La difícil situación que vive el país también ha impactado las operaciones de las empresas en Colombia.

Así lo reveló una encuesta de Red de Cámaras de Comercio, Confecámaras, que detalló que “el 35,1 % de empresarios tendrá que cerrar parcialmente, si continúan los bloqueos en el país”.

Según dato de American Retail, la encuesta se aplicó a 12.979 empresarios de las regiones de Colombia.

El 90,4% de los empresarios encuestados indicó que de los puestos de trabajo que genera, entre 1 y 5 están en riesgo por los efectos del paro nacional y el bloqueo de las vías y el 44,7%.

De continuar los bloqueos a la actividad empresarial, el 35,1% de los encuestados afirmó que tendrá que cerrar parcialmente, el 32,5% se verá forzado a reducir los costos para sostener la operación, el 20,2% reducirá su personal y el 12,2% cerrará su empresa.

En la misma línea, la ‘Encuesta de las Cámaras de Comercio sobre el Efecto en las Empresas de la Coyuntura Social y Orden Público’, que se aplicó a 12.979 empresarios de las regiones de Colombia, detalló que el 22,2% de los encuestados comentó que tuvo que suspender su operación, mientras que el 53,4% ha operado entre el 1% y 50% de su capacidad.

Julián Domínguez, presidente de Confecámaras planteó: “Estas dramáticas cifras muestran la realidad de los empresarios, en su gran mayoría micros y pequeños, de todas las regiones del país, por cuenta de los bloqueos de las carreteras”.

“Las pérdidas de empleos son incontables, lo que implica que miles de familias están perdiendo su sustento diario. Los bloqueos nada tienen que ver con la protesta pacífica y son una violación a los derechos fundamentales de los colombianos, a la salud, al trabajo y la libre movilidad”, aseguró.

Antecedentes de las protestas

Las protestas en Colombia (que suman más de 80 mil personas que se han movilizado en las calles) comenzaron el 28 de abril contra una reforma tributaria propuesta por el Gobierno del presidente Iván Duque, que tuvo como objetivo mitigar los efectos económicos de la pandemia.

La propuesta fue vista como insuficiente para lidiar con la profunda crisis económica que ha agravado los niveles de desempleo e informalidad, y que ha puesto a más del 40% de los colombianos en situación de pobreza, según datos oficiales.

 Desde el 19 de mayo el puerto de Buenaventura se transformó en un escenario de saqueos, disturbios y diferentes hechos de orden público que también han provocado heridos.

Lo anterior provocó que navieras –entre ellas Transborder, C.H. Robinson Worldwide, Maersk, Mediterranean Shipping Company (MSC)– suspendieran sus operaciones en el puerto, que provocó que mantengan atrapadas las cargas destinadas al interior de Colombia, dejando a la estación marítima sin capacidad de almacenamiento.