La empresa de fabricación de contenedores Maersk Container Industry (MCI) ha desarrollado una tecnología para modernizar el transporte de productos frescos de todo el mundo, mediante la mejora de la condición del aire y reduciendo significativamente el consumo de energía.

MCI, que forma parte de Maersk Group, ha creado un dispositivo de ventilación automática, llamado AV+, que monitorea los niveles de dióxido de carbono (CO2) emitidos por las frutas y hortalizas en tránsito, y ajusta la cantidad de aire fresco que entra en el contenedor de acuerdo a estos niveles.

Las rejillas de ventilación convencionales fijas abiertas al intercambio de aire (Airex) a menudo permiten que entre más aire fresco del necesario. A continuación, todo este aire debe ser enfriado por un sistema separado.

El gerente de ventas y marketing de MCI, Anders G. Holm, señaló a Portalfruticola.com que el principal beneficio de esta tecnología es que, desde que ya no deja entrar más aire fresco de lo necesario, no se debe aplicar un enfriamiento innecesario.

"Creo que con la solución de ventilación automática la principal ventaja es que sólo se deja entrar el aire fresco que se requiere para mantener los productos frescos, y por lo tanto, se puede reducir el consumo de energía, ya que habrá menos aire caliente entrando al contenedor que necesitas refrescar", dijo Holm.

"La manera normal es casi como tener el aire acondicionado funcionando en su casa con una puerta abierta en un día caluroso, algo que no harías. Así que es un problema similar", añadió.

"Por lo general lo que se hace hoy en día con ajustes de presión fijos funciona, pero a veces puede haber problemas. Por ejemplo, cuando calculas los ajustes para la ventilación de aire fresco, no sabes cómo es la fuente de alimentación, no sabes la etapa de madurez de la fruta, y nos sabes qué tipo de configuración del software utiliza la máquina", dijo.

"Realmente es un trabajo de adivinación, y siempre debes asegurarte de que es suficiente, por lo que a menudo hay demasiado aire fresco. Así que una cosa es la energía, pero además cuando no dejas entrar tanto aire fresco, enfrías menos, y por lo tanto deshumidificas menos", añadió.

Cuando demasiada humedad se extrae del aire debido a un exceso de enfriamiento puede conducir a que la fruta se deshidrate, afectando su calidad.

El dispositivo también puede ser pre-programado para el tipo de fruta u hortaliza que se transporta, ya que el nivel máximo de CO2 en el aire que pueden soportar puede variar en gran medida. Por ejemplo, las paltas no deberán ser transportadas en un entorno con más de un 10% de CO2, mientras que para las papas, esta cifra es muy inferior al 3%.

Esto significa que, con AV+, se utilizaría menos energía transportando paltas que papas, ya que las primeras requieren que menos aire fresco sea bombeado durante todo el viaje, el que luego debe ser enfriado.

El alcance potencial de esta tecnología es enorme, ya que Holm dijo que, aunque es más valiosa siendo utilizada con algunos tipos de carga que en otros, el sistema de ventilación automático también podría ser utilizado en el transporte de cualquier fruta u hortaliza fresca que requiera refrigeración.

"Creo que este sistema es más una cosa general que puede ser utilizada para todo tipo de productos, y luego hay algunos en los que puede tener un efecto muy beneficioso. Pero está hecho para todo enfriado", dijo.

Aunque MCI se centra exclusivamente en contenedores de transporte, Holm, dijo que la tecnología podría ser fácilmente integrada a los vehículos de carretera para el transporte de productos frescos en tierra.

La asequibilidad no debe ser un problema con AV+ tampoco, ya que MCI afirma que la tecnología puede pagarse por sí misma con en el ahorro de energía durante el primer año de funcionamiento.

Holm también dijo que, a pesar de la posible dificultad inicial de convencer a la industria de adoptar un nuevo sistema cuando el actual todavía funciona, él cree que el aspecto de la eficiencia energética y las condiciones mejoradas para las frutas y hortalizas frescas destacará, y puede imaginar que este sistema será la norma dentro de una década.

"La tecnología de ajuste fijo que se utiliza hoy en día ha sido utilizada durante muchos años por muchas empresas, así que sabemos que tomará tiempo cambiar la mentalidad de las personas. Creo que va a tomar algún tiempo enfrentarnos a algunos hábitos muy fuertes", comentó.

"En nuestro sector hay una gran cantidad de trabajo realizándose para mejorar la eficiencia energética y este es un muy buen paso, ya que mejora las condiciones para la fruta, al mismo tiempo, así que es una forma más inteligente. Tiene perfecto sentido. Creo que, tal vez en 10 años, va a ser el producto estándar para transportar frutas y hortalizas frescas”, concluyó.

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