Se buscará reemplazar a aquellas consideradas ineficientes

La dinámica dentro de la industria de la uva de mesa brasileña está cambiando. Lluvias y cosechas más tempranas su suman a la competencia con los productores californianos  y a los altos costos de producción junto a un tipo de cambio nada fácil. 

Para uno de los grandes dentro de la industria en Brasil estas condiciones han impulsado un programa de mejoramiento genético que tiene como objetivo reemplazar aquellas variedades consideradas ineficientes.

En www.portalfruticola.com conversamos con Daniel Watanabe, director comercial de Fazendas Labrunier, propiedad del Grupo JD acerca de la reciente temporada de exportación en noviembre y diciembre y sobre qué es lo que está haciendo la compañía para sacer el máximo de provecho a la situación actual.

Algunos distribuidores pueden estar viendo una baja en sus programas de uva desde Brasil, mientras los productores de California están manteniendo sus productos en las tiendas locales estadounidenses por más tiempo, pero los exportadores brasileños no están de brazos cruzados cuando de oportunidades se habla.

Fazendas Labrunier representa el 12% de la producción de uvas en Brasil con cinco campos en el estado de Bahía y Pernambuco, comercializando la fruta directamente con algunas de las cadenas más grades del mundo como Wal Mart, Carrefour, Loblaws, Tesco, Sainsbury, Albert Heijn y Coop Norden.

Además la compañía tiene una importante asociación en Norte América con el Grupo Oppenheimer para abastecer a otros retails norteamericanos.

Para mantener estas relaciones y un papel en las exportaciones, Labrunier está poniendo atención a las actuales condiciones de competencia y está invirtiendo en la investigación de nuevas variedades.

“Para nosotros es claro que variedades como la Thompson, Sugraone y Crimson ya no son posibles. Hoy hay mayores costos de producción y un gran problema es nuestro tipo de cambio”, dijo.

Fotografía: Daniel Wanatabe, director comercial Fazendas Labrunier

“Ahora el tipo de cambio es muy fuerte con el dólar y el euro, por lo que tenemos que ser muy eficaces. Estamos invirtiendo en una gran programa para encontrar nuevas variedades y reemplazar a las actuales”.

El ejecutivo puntualizó que actualmente están probando 76 nuevas variedades en colaboración con diversos criadores de EE.UU, Sudáfrica, España y Brasil.

“Con las nuevas variedades que estamos probando hemos visto muy buenos resultados, especialmente en términos de rendimiento y vida post cosecha. Generalmente en octubre tenemos problemas con la coloración de las uvas de color, pero con estas variedades es más fácil obtener el color”.

Agregó que el programa es parte de una estrategia de largo plazo, pero espera que este se pueda aplicar a fines de 2013.

“Una vez que encontremos las variedades correctas, tenemos que esperar por lo menos tres años para determinar en qué trabajaremos y en qué no. Comenzamos el año pasado por lo que deberíamos estar seleccionando las nuevas variedades a fines del próximo año y luego comenzaríamos a reemplazar las actuales”.

“No vamos a parar una vez que encontremos las variedades buenas, nuestro plan es mantener el programa para obtener mejores uvas”.

La pasada temporada

Wanatabe  indicó que si bien las cifras oficiales aún no han sido entregadas, pareciera ser que las exportaciones de uvas de Brasil en 2011 serán similares a las 4,150 toneladas métricas (TM) registradas en 2010, aunque con diferentes porcentajes en función del mercado de destino.

Dijo que los volúmenes al Reino Unido fueron un 14% inferior. En Europa Central también registraron una baja, en este caso del 6%. “En total las exportaciones a Europa fueron un 9% menor a las de 2010”, sostuvo.

En el caso de Norte América los volúmenes aumentaron un 16%. “Todo el mundo se mostró optimista respecto al mercado de Norte América con el precio de apertura que fue muy bueno, vendiendo entre US$32-34 por caja en comparación a 2010 cuando comenzó a US$24”.

Explicó que la caída de los precios durante diciembre se dio debido a que las uvas de California permanecieron más tiempo en el mercado, haciendo más lento el ritmo de las ventas y que la calidad de la uva brasileña no era favorable para su almacenamiento.

“Este año -2012- vamos a producir unas 19.000 TM, unas 3.000 TM más, porque ya hemos reemplazado algunas de las antiguas y algunas de las nuevas áreas alcanzarán rendimiento más altos”.

Productores mirando a lo local y el mercado de la uva brasileña

Wanatabe comentó que la situación actual ha llevado a muchos productores a mirar al mercado local.

“Algunos productores están sustituyendo algunas de las uvas sin semillas por uvas con semillas. Las uvas con semillas tienden a tener un rendimiento mucho mejor que las sin semillas, por lo que están reemplazando sus uvas y vendiéndolas localmente”.

Pero, ¿Por qué no continuar exportando?

“Si venden en el mercado local pueden mejorar el flujo de caja u obtener dinero más rápido. En el caso de las exportaciones  toma entre 60 a 90 días recibir el pago completo”.

A pesar de esto el ejecutivo hace hincapié en que el mercado brasileño se ha transformado en uno muy interesante.

“La población brasileña ha llegado a mas de 190 millones de personas y 80 millones pueden ser considerados consumidores de alta gama. El consumo per cápita de fruta en Brasil es de alrededor de 60kg por habitante al año, algo que es bastante bajo en comparación al consumo europeo el cual está por encima de 120kg”.

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