Europa no sólo es una preocupación de los citricultores. También la evolución de ese mercado inquieta a los productores de palta. Para esta campaña, la situación en el Viejo Continente (particularmente en España) genera incertidumbre en la actividad e indujo al exportador tradicional a mirar con sumo interés otros mercados, como el interno. Así lo afirmó a LA GACETA Julio Figueroa, presidente de la Asociación de Productores de Palta de Tucumán (Apropal).

Según el dirigente, las lluvias de otoño retrasaron la cosecha, pero el mercado interno está saturado con excesivos volúmenes de fruta. "Aún más, debe competir con los descartes de las exportaciones chilenas a los Estados Unidos y a Europa", acotó. Como consecuencia de esa situación, Apropal evalúa una caída de los precios de venta en Buenos Aires y en la zona central.

De acuerdo con un informe elaborado por los expertos de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), la Argentina produce cerca de 12.000 toneladas de palta. Tucumán es uno de los principales proveedores nacionales de palta al Mercado Central de Buenos Aires, seguido por Chile. La producción de palta se inicia en marzo y finaliza entre noviembre y diciembre, siendo "Hass" la variedad más difundida. Según el presidente de la Apropal, la situación de la palta en esta campaña se presenta con matices heterogéneos respecto de años anteriores.

Figueroa recordó que las plantaciones durante la primavera de 2009 sufrieron una severa sequía y un temporal de calores que perdió mas del 90% de la producción para el año subsiguiente. "Esto quiere decir que, durante 2010, Tucumán no produjo paltas, siendo que es la Provincia líder en producción del país, con un 67% del total nacional", indicó. Las plantas se recuperaron para producir recién para la campaña 2011. Y esto, según Apropal, se benefició ya que hubo heladas en Chile que redujeron su producción y eso limitó la exportación a nuestro país. Para la actividad nacional le ha surgido un directo competidor: Perú. Figueroa agregó que ese país cubre casi toda la demanda europea en la ventana comercial que disponía la Argentina. En este contexto, los productores pequeños y medianos están cosechando productos de regular calidad por los efectos de la sequía del verano. "Pese a que el 87% de las plantaciones son irrigadas, y de ello el 47% son por riego presurizado, las frutas no alcanzaron los tamaños normales por la baja humedad ambiente", indicó. Así, Salta y Jujuy enviaron al mercado casi toda su producción por la ausencia de exportaciones. Algo similar esta pasando con la palta de Tucumán, finalizó el productor.

Fuente: La Gaceta