En los últimos siete años la competitividad de los cítricos uruguayos cayó de manera precipitada frente a los principales países competidores como Chile, Perú y Sudáfrica.

Es que la producción de esos países competidores ingresa a la Unión Europea -el principal mercado mundial- con arancel cero; mientras que la fruta uruguaya ingresa a la misma plaza pagando un arancel de 12,5% precio mayorista. Esta situación se acentúa aún más al perderse las preferencias arancelarias, que incrementa el pago entre un 16% y un 17,5%.

Según consignó el diario local El País, los empresarios del sector afirmaron que "es una mochila imposible de cargar".

Uruguay lleva más de 15 años negociando la apertura del mercado de Estados Unidos para los cítricos y en estos momentos, refleja un análisis de riesgo, se ha logrado un avance de la negociación, pero aún restan varios pasos internos por darse antes de que el ingreso se transforme en una realidad.

Ante esa dilatación comercial, hay empresas de ese país que comienzan a bajar las cortinas en estos tiempos, ya que les resulta imposible enfrentar la pérdida de competitividad, el encarecimiento de la mano de obra y de otros costos fijos. En Paysandú, por ejemplo, dos de las empresas más importantes del grupo exportador Urudor -Sandupay y Azucitrus- entraron en condiciones de venta. Sobre una ya se concretó la operación del campo y la planta de paking. Y otras empresas citrícolas uruguayas están pensando adoptar el mismo camino.

La citricultura exportadora está generando arriba de 10.000 puestos de trabajo en forma directa. Gran parte de esos empleos son zafrales y la zafra de cítricos es de las más largas, porque comienza en marzo-abril y finaliza en octubre-noviembre. El desarrollo citrícola no se contrapone con otras zafras y los operarios pueden seguir trabajando en otros sectores de la frutihorticultura.

Este año, la exportación de cítricos uruguayos se redujo un 20% y la mayor caída se dio en el rubro mandarinas, donde se registró una baja de la exportación de 13.000 toneladas, según datos de la Oficina de Programación y Política Agropecuaria (Opypa) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Como consecuencia, la producción de ese país quedó en quinto lugar como exportador, perdiendo la tercera posición que venía ocupando durante los últimos 5 años: Chile y Australia lo golpearon muy duro.

Este año, el bloque latinoamericano produjo 6,49 millones de toneladas de cítricos, volumen que representa una caída de un 0,6% respecto de 2010 y de un 17,3% frente a la zafra 2007, según datos de Opypa. Creció además un 18% la producción de limón, un 12% la de pomelo, aunque la de mandarina y naranja, los rubros más importantes, se redujeron un 8,5% y un 6,23%, respectivamente, según la publicación.

Fuente: La Gaceta