México está atravesando una larga sequía, con precipitaciones que disminuyeron casi a la mitad durante el último año. Esta situación tiene a los árboles de aguacate en la mira, para poder satisfacer sus necesidades hídricas.

Lo anterior ha llevado a los agricultores de subsistencia -ya desesperados- a tomar medidas directas contra los huertos comerciales y las plantaciones ilegales de aguacate que, según dicen, requieren grandes cantidades de agua y están secando los cursos de esta en las montañas.

Según reportan algunos medios, ríos e incluso lagos enteros están desapareciendo en Michoacán, a medida que la sequía se combina con un aumento en el uso del agua.

ABC News informó que agricultores y activistas del pueblo Villa Madero en Michoacán, organizaron equipos para ir a las montañas a sacar las bombas ilegales, así como los estanques de riego sin licencia.

“En los últimos 10 años, los arroyos, los manantiales y los ríos se han ido secando, y el agua ha sido captada, principalmente para ser utilizada en aguacates y berries”, dijo el activista local, Julio Santoyo, quien agregó que “hay caseríos en la parte baja del municipio que ya no tienen agua”.

Otros grupos se reunieron para romper los estanques ilegales de contención de agua que han estado succionando el recurso desde manantiales que han abastecido a los residentes locales durante años.

Otro residente de El Sauz, Francisco Gómez Cortés, dijo a periodistas de la Agencia AP que simplemente no tienen suficiente agua para el consumo humano. Declaró que llevan 15 años pidiendo a los propietarios que dejen que el manantial fluya cuesta abajo.

A los manifestantes se unió el alcalde de Villa Madero, quien también culpa a los ‘extranjeros’ por la crisis del agua.

"Hay personas que no son de este pueblo, que vienen a nuestro municipio y nos está invadiendo", comentó el alcalde Froilán Alcauter Ibarra a periodistas de la Agencia AP. "Le están quitando el agua a la gente que vive cuesta abajo y no se dan cuenta de que son los más pobres".

ABC News también informó que los residentes dijeron que no quieren negar completamente el agua a los huertos, más bien, han propuesto un acuerdo para dar a los propietarios el 20% del agua de los arroyos locales si permiten que el 80% restante siga fluyendo. Dicen que aún no han obtenido respuesta.

El riesgo de apuntar a los árboles de aguacate

La desesperada decisión de tomar acciones por su cuenta podría tener graves consecuencias para los ciudadanos. Carteles de la droga se han infiltrado en la industria mexicana del aguacate, que a menudo patrocinan o protegen el lucrativo negocio. Un posible conflicto con los productores podría escalar y los manifestantes son conscientes del riesgo.

Los activistas de la zona dicen que han sufrido amenazas, secuestros y palizas en el pasado. "Corremos un grave riesgo de que nos maten por protestar", dijo Gómez Cortés. "Por necesidad, estamos haciendo lo que el gobierno debería hacer", agregó.

Los residentes locales comentaron que los agricultores no sólo están desviando el agua de los arroyos, también le están pagando a camiones cisternas para que capten y luego transporten miles de galones de agua desde los lagos para regar los huertos.

Ahora la policía estatal se encuentra patrullando las orillas de los lagos y está deteniendo a las personas que con sus camiones están extrayendo agua.

Noticia relacionada: EE.UU. pone sobre aviso a sector aguacatero de México por plantaciones ilegales

El tema de las plantaciones ilegales de aguacate en México se ha transformado en un tema político en los últimos meses. En febrero, el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, celebró una conferencia de prensa conjunta con el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez, para abordar el tema.

Salazar dijo que Estados Unidos no importará fruta cultivada en plantaciones ilegales, las que además contribuyen a la deforestación.

"Las personas detrás de los más de 800 huertos ilegales no deben tener la oportunidad de vender estos aguacates en el mercado estadounidense", dijo Salazar.

En abril, más de 25 organizaciones instaron al Departamento de Estado de Estados Unidos a detener las importaciones de aguacate vinculados a la deforestación en México. La carta, distribuida por el Centro para la Diversidad Biológica, citaba una serie de preocupaciones sobre la pérdida del hábitat de la mariposa monarca, así como amenazas a los inspectores de productos locales.

El 21 de noviembre se realizará el Global Avocado Summit organizado por el Comité de Paltas de Chile y Yentzen Group, en el centro de eventos Casino Monticello.