El 2023 se ha caracterizado por la presencia del Fenómeno del Niño, que ha generado un alza en las temperaturas, siendo más caluroso de lo normal. Sumado a ello, el aumento de las precipitaciones que ha estado presente en el centro y sur de Chile, ha generado un aumento de caudales en los ríos, esteros y riachuelos debido a la presencia de lluvia en la cordillera y precordillera.

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Para conocer las implicancias en la fruticultura de Chile, Portalfruticola.com conversó con el asesor experto en cerezas, Walter Masman, y con Tomás Vicente, director de la Asociación Gremial de Riego y Drenaje (Agryd) y gerente regional de Wiseconn para Latinoamérica, quienes analizaron la situación actual y futura de la industria.

“Hoy los frutales que están en floración son particularmente los carozos y dentro de lo que me toca ver, es probable que la especie que pudiese estar más afectada serían los cerezos, eso particularmente porque hoy día son las especies cuyos requerimientos de frío son mayores en términos de exigencias”.

Vicente especificó que los huertos se encuentran con los suelos saturados, destruidos en términos de estructura, por todo el barro y el arrastre de material que quedó depositado en algunos predios sobre todo en la zona del Maule y O'Higgins. “Hay daños estructurales a los sistemas de riego que golpean y está el riesgo de cómo vamos a poder regar, porque pasado el 18 y esperando buenas condiciones climáticas, ya las plantas van a empezar a demandar en riego”.

Masman explicó que los damascos y algunas variedades de ciruelo pudiesen estar siendo afectados hoy por hoy.

Respecto al apoyo a los productores afectados, Vicente indicó que están trabajando para apoyar a través de iniciativas de la Comisión Nacional de Riego que puedan acceder a fondos concursables de emergencia, para que puedan recuperar esa infraestructura. “Todos esos elementos han conformado, junto con esta lluvia, una verdadera tormenta perfecta para la agricultura. Estamos tratando de buscar como gremio que se entreguen herramientas concretas, como financiamiento con garantía estatal”.

Horas frío

Un factor relevante que comentan los expertos es la acumulación de frío. Masman añadió que “el tener una baja acumulación de horas frío trae consigo una baja oferta floral principal y una enorme desuniformidad; eso se comienza a manifestar en aquellas variedades cuyos requerimientos de frío son mayores”.

Agregó que en algunas localidades se ha generado un 30 a un 40% menos de horas frío que el último año más cálido. “Y sumado a la calidad del frío que tuvimos fue muy deficiente, ya que tuvimos julio, agosto más cálido registrado y eso está repercutiendo en el resultado fenológico”.

Masman explicó que ha podido observar que Lapins, siendo una variedad de requerimientos muy bajos de frío, “también está presentando anomalías desde el punto de vista de floración. Es a contraposición de lo que fue la temporada pasada, de muy buena acumulación de frío, con una expresión floral extraordinaria”.

El asesor de cerezos fue enfático en indicar que el período de fecundación que ha existido ha sido malo desde el punto de la viabilidad de la flor. “Porque las temperaturas que hemos tenido, sobre todo lo que fue la semana pasada y parte de la semana antepasada, con temperaturas muy bajas, no permite el vuelo de abejas y tampoco la viabilidad de la flor, donde por sobre los 15 grados se genera un mejor desarrollo del tubo polínico y la viabilidad del óvulo”.

Cerezas

Respecto al cultivo de cerezas, Masman indicó que “es probable que se genere una baja en volumen, por lo que la estimación esperada de los 100 millones de cajas o más, probablemente no sea así. Porque ha existido una baja oferta floral, una des uniformidad importante y la condición climática que se está generando hoy día. Las lluvias han afectado a los árboles desde el punto de vista del desarrollo de enfermedades de madera, que probablemente se van a empezar a visualizar una vez que las temperaturas comiencen a elevarse”.

Vicente concuerda que los cerezos serían uno de los frutales más afectados y comentó que junto a los almendros, son los primeros cultivos en haber brotado, “debido a que tuvimos un invierno cálido, entonces tuvimos brotaciones antes de tiempo y eso obviamente genera que la planta está en la condición más susceptible”.

Manejos agronómicos

El asesor de cerezos recomienda tener un programa fitosanitario con los mejores activos, desde el punto de vista de los fungicidas, para poder controlar enfermedades como botritis y hongos que hoy afectan la floración. “Es un año para reforzar, para tener complementos desde toda lógica, tanto de fungicidas del tipo sintético, como biológico, en la línea de buscar una estrategia que permita poder enfrentar una situación tan distinta como la de este año”.

El director de la Asociación Gremial de Riego y Drenaje recomendó hacer calicatas o utilizar un sensor que permita ver la dinámica de extracción para poder comprender si la planta ya está trabajando y está empezando a tomar el agua.

Vicente agregó que los productores deben poner atención en que es probable que este tipo de eventos vuelvan a ocurrir, “por lo que les recomiendo reforzar la infraestructura externa o alrededor de los campos, mejorar los drenajes para absorber lo más rápido el agua”.