La naviera alemana Hapag-Lloyd obtuvo el financiamiento para la construcción de cinco nuevos buques de 10.500 TEUs ordenados por la compañía en abril de este año. 

La empresa detalló por medio de un comunicado que acordó un préstamo por USD 372 millones, a 12 años plazo, con un consorcio bancario.

Las cinco nuevas naves serán utilizadas principalmente en los tráficos de Sudamérica y se espera sean entregadas entre octubre de 2016 y mayo de 2017. Cada una cuenta con 2.100 espacios para contenedores refrigerados (reefers) y son especialmente adecuados para el transporte de alimentos perecibles.

Con esta inversión, Hapag-Lloyd busca fortalecer su posición como uno de los principales carriers de contenedores reefers a nivel mundial.

Hay que señalar que el consorcio bancario estuvo liderado conjuntamente por Credit Agricole, DNB, HSBC y UniCredit. Asimismo, dado que la orden de los nuevos buques fue realizada a un astillero coreano, las agencias de crédito de exportación coreanas K-Sure y KEXIM también participaron en el financiamiento.

Paralelamente, la naviera consiguió incrementar su línea de crédito con el consorcio bancario de USD 95 a USD 200 millones, con el fin de fortalecer sus reservas de liquidez en condiciones financieras atractivas.

Asimismo, usando como referencia el financiamiento obtenido para las naves de 10.500 TEUs, la compañía re-negoció otros contratos de deuda existentes, logrando disminuir en USD 40 millones su carga de intereses durante el periodo de amortización de los mismos.

“Hemos asegurado el financiamiento para nuestros nuevos buques en atractivas condiciones”, afirmó el gerente de Finanzas de Hapag-Lloyd, Nicolás Burr.

“Además hemos conseguido reducir significativamente nuestra carga de intereses y, al mismo tiempo, obtener mayor flexibilidad financiera al aumentar nuestros compromisos de liquidez”, concluyó.

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