Durante los últimos tres meses, de un total de 150 productos innovadores que contienen capsicum a nivel mundial, 37 fueron lanzados en el mercado australiano, reveló un estudio de mercado comisionado por AUSVEG Australia.

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Para el organismo, lo anterior abre nuevas oportunidades para los productores australianos, quienes podrían tomar ventaja de la fuerte demanda que existe por los productos que contienen capsicum.

“Este reciente aumento de los productos lanzados en Australia demuestra las oportunidades disponibles si podemos animar a los líderes mundiales en innovación de productos a que inviertan en el mercado australiano”, señaló Andrew White, gerente de Desarrollo de la Industria y Comunicaciones de AUSVEG, en un comunicado emitido por el organismo.

Para AUSVEG, los productores locales pueden aprender lecciones de sus competidores internacionales, como es el caso de Japón, donde se elaboró un aceite para masajes con infusión de capsicum, producto que recientemente fue lanzado en el extranjero.

A nivel local, los aperitivos dominan el mercado. Estos representan el 20% de los nuevos productos que contienen capsicum lanzados entre marzo y mayo de 2014 en Australia. A estos le siguen las salsas y comidas pre-elaboradas, como es el caso del arroz y el atún.

“Si bien los productores australianos de hortalizas se encuentran entre los más productivos del mundo, un exceso de oferta puede dar lugar a pérdidas financieras. Nuevos usos para el exceso de vegetales de segunda categoría, tales como comidas innovadoras y productos farmacéuticos, pueden ayudar a que los productores australianos sean más rentables”, sostuvo White.

Pero no sólo el contenido del producto atrae a los consumidores. También lo hace el tipo de embalaje.

Según lo informado, el 30% de los nuevos productos lanzados en el mercado australiano venían en un paquete con un formato flexible, seguido de un 12% en tarros.

“Además del producto en sí, las opciones de los consumidores también se pueden ver influenciadas por el tipo de embalaje utilizado para contener los alimentos”, sostuvo White.

“Los productores y procesadores [de alimentos] deben asegurarse de que el envasado del producto apele a los consumidores en términos de conveniencia, atractivo visual y reducción de desechos”, agregó.

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