Alemania enfrenta cambios en su mercado de cerezas

Alemania, el tercer mayor importador de cerezas del mundo después de China/Hong Kong y Rusia, atraviesa una temporada marcada por ajustes en su abastecimiento debido a la fuerte caída de la producción en Turquía, su principal proveedor.

De acuerdo con datos del sector, reportados en un informe del Servicio Agrícola Exterior del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), de 2015 a 2024, entre el 54 y el 77% de las cerezas consumidas en Alemania fueron importadas, con volúmenes que oscilaron entre 51.000 y 75.000 toneladas métricas anuales. La mayor parte correspondió a cerezas dulces, que representaron hasta el 81% de las compras externas.

Turquía en crisis y España gana terreno en cerezas

Turquía lidera históricamente las exportaciones hacia Alemania, con una participación del 36% del mercado total y del 46% en cerezas dulces durante la campaña 2024/25. Sin embargo, las heladas tardías de abril redujeron a la mitad su producción, lo que provocará una disminución sustancial de envíos esta temporada.

El vacío está siendo compensado parcialmente con mayor producción local alemana y un incremento de importaciones desde España, que se ha consolidado como el segundo mayor proveedor.

En el caso de otro proveedores, como Estados Unidos, las importaciones desde el país norteamericano siguen siendo reducidas, aunque se observan nichos de oportunidad al inicio y cierre del ciclo local (mayo/junio y agosto/septiembre). El segundo período es considerado más favorable, dado que hay menor competencia de cerezas turcas a bajo precio. En la campaña 2023/24, Alemania importó directamente apenas tres toneladas métricas desde Estados Unidos.

Consumo estacional y tendencias

En Alemania, las cerezas son un producto de temporada, con el 92,5% de las compras domésticas concentradas en junio y julio. El consumo per cápita de cerezas alcanza los 2,2 kilos, por debajo de los duraznos (2,8 kilos), pero más del doble que las ciruelas (1 kilo).

Las cerezas dulces han ganado popularidad como snack saludable, mientras que las cerezas ácidas pierden terreno: el 87% de su producción nacional se destina al procesamiento (conserva, congelado y jugos).

Los consumidores alemanes muestran una clara preferencia por calibres grandes: en julio de 2025, el precio mayorista de cerezas dulces de más de 26 mm alcanzó los 6,53 euros/kg, frente a los 4,19 euros/kg de los calibres menores.

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