Las condiciones meteorológicas para la uva de mesa australiana son hasta ahora "excelentes" y se espera que se mantengan durante toda la temporada.
Esto ha ayudado a aumentar las previsiones de producción a un récord de 220.000 toneladas métricas para la temporada 2023-24, según un reciente reporte de la USDA.
También se espera que el buen clima produzca uvas de alta calidad, aumentando la oferta para los mercados de exportación. El volumen de producción de esta temporada representaría el tercer resultado de exportación más alto registrado, con 140.000 toneladas métricas.
Además, se espera que el aumento de la producción impulse el consumo en un 5%.
El informe indica que un aspecto positivo clave para el sector australiano de la uva de mesa es que los productores han ampliado la superficie cultivada y se han centrado en nuevas variedades de uva de mesa propias y orientadas a la exportación.
Las variedades elegidas están impulsadas por la fuerte demanda de mercados asiáticos como China. Los consumidores chinos prefieren cada vez más las variedades sin semilla, como la Red Globe, y también están interesados en probar nuevos cultivos y sabores.
China es el principal mercado para la uva de mesa australiana y Australia es actualmente uno de los tres principales proveedores del país asiático.
Otros mercados asiáticos importantes son Indonesia, Vietnam, Filipinas, Tailandia, Japón y Hong Kong. En conjunto, estos mercados asiáticos han recibido entre el 80 y el 85% del total de las exportaciones australianas de uva de mesa.
Los otros dos grandes proveedores de China son Perú y Chile, que junto con Australia representan el 90% de las importaciones totales de uva de mesa.
La ventaja competitiva de Australia reside en su menor tiempo de transporte, entre 18 y 20 días, mientras que la fruta procedente de Sudamérica puede tardar unos 35 días en llegar.
