Investigadores de la Universidad de Guelph han descubierto que al menos una especie de abejas que anida en el suelo está expuesta a niveles letales de neonicotinoides encontrados en el suelo.

El estudio, primero en su clase, es importante dado que la mayoría de las especies de abejas en Canadá hacen sus nidos en ese territorio.

La investigación se centró en las abejas de Las Calabazas, que se alimentan casi exclusivamente del néctar y el polen de las flores de calabaza, zapallo y calabaza, señaló el medio Science Daily.

Los investigadores descubrieron que la probabilidad de que las abejas de calabaza estén expuestas crónicamente a dosis letales de un neonicotinoide clave, la clothianidina, en el suelo era del 36% o más en los campos de calabaza.

Eso significa que el 36% de la población probablemente sea expuesta a dosis letales, lo que está muy por encima del umbral aceptable del 5%, en el que el 95% de las abejas sobrevivirían a la exposición.

"Estos hallazgos son aplicables a muchas otras especies de abejas silvestres en Canadá que anidan en o cerca de granjas", señaló Nigel Raine, investigador que trabajó en el estudio con la estudiante de doctorado y autora principal Susan Chan.

Agregó que "aún no sabemos qué efecto tienen estos pesticidas en el número de abejas de calabaza porque las abejas silvestres aún no se rastrean de la misma manera que se monitorean las poblaciones de abejas melíferas".

"Pero sí sabemos que muchas otras especies de abejas silvestres anidan y se alimentan en campos de cultivo, por eso estos hallazgos son tan preocupantes".

Investigación

Según lo que informó Science Daily, Chan recolectó muestras de suelo de 18 campos comerciales de calabaza en Ontario. Posteriormente, los investigadores utilizaron la información de residuos de pesticidas de estas muestras y un segundo conjunto de datos gubernamentales de cultivos de campo para evaluar el riesgo de las abejas de calabaza que anidan en el suelo.

La investigación se produce cuando el servicio de salud de Canada establece nuevos límites en el uso de tres neonicotinoides clave, incluida la clothianidina, mientras decide si imponer una eliminación completa de estos pesticidas.

"Las evaluaciones de riesgo actuales para los impactos de insecticidas en los polinizadores giran en torno a las abejas melíferas, una especie que rara vez entra en contacto con el suelo", explicó Raine.

"Sin embargo, la mayoría de las especies de abejas viven la mayor parte de su vida en el suelo, por lo que los riesgos de exposición a pesticidas del suelo deberían ser un factor importante en estas importantes decisiones regulatorias", agregó.

"Hasta ahora, nadie ha examinado el riesgo para las abejas de los neónicos en el suelo a pesar de que estos pesticidas se aplican directamente a las semillas plantadas en el suelo, o se rocían directamente sobre el suelo en la siembra, y pueden durar hasta meses después de la aplicación", detalló Chan.

"Solo alrededor del 20% del insecticida neonicotinoide aplicado a las semillas recubiertas se absorbe en los cultivos; el resto permanece en el suelo y puede permanecer allí en las campañas posteriores".

Residuos

Como las abejas no comen tierra, es difícil saber exactamente cuánto residuo de pesticida ingresa a ellas. Pero los investigadores calcularon que incluso si son conservadores y suponen que solo el 25% de la clothianidina ingresa a la abeja, el riesgo de exposición letal en los cultivos de calabaza o calabaza es del 11%, aún por encima del umbral ampliamente aceptado del 5%.

Los neónicos han sido relacionados con preocupaciones sobre la salud de las colonias de abejas melíferas, con investigaciones que muestran que estas abejas pueden ingerir cantidades peligrosas a través del néctar o el polen.

"Se necesitan nuevos enfoques que permitan a los agricultores controlar las plagas y proteger a los polinizadores simultáneamente. Mi consejo para los agricultores es que, si encuentran de abejas de calabaza que anidan en su granja, protejan a estos polinizadores de la exposición a los neonicotinoides al no usarlos en absoluto, o al menos no usarlos cerca de las abejas. Crear lugares libres de pesticidas para vivir ayudará a su población de abejas de calabaza a crecer con el tiempo ".