Un innovador proyecto en los Países Bajos que cultiva bananas de invernadero en sustrato en lugar de suelo, ha mostrado excelentes resultados hasta el momento y pronto pasará a ensayos de campo en dos países productores.

Los investigadores de la Universidad de Wageningen señalaron que el método de cultivo podría desempeñar un papel importante en proporcionar una solución a la propagación de la enfermedad fúngica transmitida por el suelo Fusarium Wilt Tropical Race IV (TR4), que también representa una seria amenaza para la industria bananera en todo el mundo, así como el nematodo de la plaga.

Además, también podría conducir a un uso mucho más eficiente del agua y otros insumos.

Actualmente están finalizando los planes para realizar pruebas de campo en Guatemala y Filipinas. Estas pruebas serán para evaluar la viabilidad económica de los productores de banano que adopten el método de producción.

Comienzos del experimento de sustrato

Gert Kema, profesor de patología de plantas tropicales en Wageningen, explicó cómo surgió el proyecto a PortalFrutícola.com. Explicó que la universidad ha investigado bananos durante mucho tiempo. Pero hasta hace poco las plantas se cultivaban en el suelo y no crecían lo suficientemente grandes como para alcanzar la etapa de fructificación.

"Luego, el año pasado tuvimos el evento de aniversario de la universidad, así que pensamos por qué no llenamos el invernadero con plantas y las dejamos crecer hasta que fructifiquen", comentó.

"Pero para que una planta de banano crezca y sea fructífera, por supuesto, se vuelve muy alta y muy gruesa. Así que decidimos que no los vamos a poner en el suelo, sino que los pondremos en sustrato: turba de coco y lana de roca".

Ambos sustratos produjeron resultados igualmente exitosos, con las plantas creciendo muy altas y produciendo fruta de alta calidad junto con racimos de buen tamaño. Todo el proyecto fue relacionado con la variedad Cavendish, que es predominante en todo el mundo.

La empresa multinacional bananera Chiquita ofreció asistencia una vez que vio qué tan bien estaban creciendo las plantas. Brindó experiencia técnica y maduró la fruta una vez que fue cosechada, añadió Kema

La primera cosecha nacional de banano de los Países Bajos se plantó en enero de 2018, se cosechó en diciembre de ese mismo año y se vendió en supermercados locales por un euro por pieza.

"Fue un gran éxito", afirmó el investigador.

Beneficios imprevistos

Se usó el sustrato en lugar del suelo para garantizar que las plantas recibieran suficiente agua y nutrientes para producir fruta. Pero Kema indicó que durante el transcurso del experimento, el equipo se dio cuenta de que la técnica podría ser muy beneficiosa para los productores comerciales de banano.

"Nos tomamos muy en serio el cultivo de bananas en sustrato porque vimos que a esas plantas les fue extremadamente bien. Dado que trabajamos en problemas relacionados con el suelo, nos damos cuenta cada vez más de que si cultivas bananas en sustrato, literalmente levantarás la cosecha de sus problemas. No hay enfermedades bacterianas, sin nematodos, sin enfermedad de Panamá. Y, por supuesto, podemos ajustar de forma precisa el agua y la nutrición", destacó.

"Dado que esas plantas se desarrollaron muy bien y produjeron racimos muy buenos a pesar del hecho de que estaban en una losa muy pequeña de lana de roca, que es una sustancia inerte, pensamos que esto es algo que realmente tenemos que probar en el campo, particularmente en las áreas afectadas por problemas transmitidos por el suelo".

Los investigadores crearon una empresa derivada y están trabajando con empresas asociadas para construir un invernadero más grande. Esto serviría como un centro de innovación donde podrán ajustar el método de crecimiento y abordar problemas técnicos.

Ensayos de campo en Asia y América Central

Planean realizar simultáneamente pruebas de campo en Guatemala y Filipinas para evaluar la viabilidad económica del método de producción.

"Por supuesto que tenemos que hacer eso. Era un invernadero y el costo de los insumos es muy alto", remarcó.

"Necesitamos saber cuál es el costo adicional para los productores, la productividad de esas plantas en sustrato, cuál es la calidad, cómo se comportan dentro de la cadena logística", comentó.

El equipo está en contacto con varias compañías y, de ser posible, espera comenzar las pruebas durante el próximo mes.

Señaló que los métodos de producción de banano se han mantenido sin cambios, dentro de todo, en las últimas décadas. Pero muchos otros cultivos, como los tomates de invernadero, han disfrutado de niveles significativos de innovación en el cultivo de los métodos de producción.

"Hace 50 años, los tomates se producían en camas planas con una cubierta de vidrio. Ahora se producen en losas de lana de roca y crecen verticalmente, ocho metros de largo; los rendimientos se han cuadruplicado simplemente por el método de cultivo. Por supuesto, se estaba produciendo muchas variedades, pero en muchas categorías hay mucha innovación en el cultivo de la planta", explicó.

"En los plátanos, la innovación es cero; son todos sistemas basados ​​en el suelo. Entonces, si podemos innovar las técnicas de cultivo produciendo al menos un porcentaje de la producción en sustrato, será una absoluta innovación".

Además, los productores afectados por plagas y enfermedades transmitidas por el suelo no tendrían que abandonar sus granjas. En cambio, podrían levantar sus plantas del suelo.

"Es una forma muy pragmática de ver el problema. Por supuesto que necesitamos nuevas variedades, pero no las tendremos mañana. La obtención de nuevas variedades tendrá resultados dentro de cinco, seis, siete años; mientras tanto, tenemos que tratar con el problema", enfatizó.

Fotografía: Imágenes cortesía de Gert Kema.