Las más de 1.700 toneladas de arándanos que se exportarán en la próxima campaña cuya cosecha comienza en octubre, representarán un notable aumento en relación a las 1.200 de la temporada anterior. 

El incremento se debe tanto a las  sensibles mejoras climáticas, y a que existirán plantas de mayor edad las que permiten obtener más frutos de ellas.

En ese contexto se estima que la producción en un porcentaje casi total se destinará a la exportación ya que el consumo local por precio y tradición es marginal.  La unión Europea y Estados Unidos absorberán, en parte casi iguales, la mayoría de las exportaciones nacionales de arándanos, al tanto que existen expectativas de ver que ocurre con el mercado de Brasil el cual estará abierto por primera vez, explicó el presidente de la Unión de Productores y Exportadores Frutícolas, Horacio Ozer Ami.

La producción de arándanos se ha convertido en una de las prácticas rurales de mayor crecimiento en los últimos años, ya que las más de 1.700 toneladas exportadas estimadas para la actual temporada, multiplican quince veces a las  120  recolectadas hace solo cuatro campañas. La gran ventaja de la producción de arándanos en Uruguay es que se encuentra en el hemisferio sur, en donde el consumo es bajo. En el hemisferio norte en cambio el consumo es alto todo el año, por lo que en momentos en los cuales no se produce se debe recurrir a las exportaciones de países como Argentina y Uruguay, que cosechan entre octubre y enero.

Fuente: Agromet

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