Innovación en cerezas: hamburguesa con pulpa de la fruta reduce la grasa y potencia un sabor más saludable

Chile se ha posicionado como un gran referente del cultivo de cerezas, convirtiéndose en la principal fruta de la canasta agroexportadora del país. El desarrollo productivo y la innovación han permitido adelantar cosechas mediante manejos agronómicos, extender la vida postcosecha y fortalecer su desarrollo comercial.
Es importante recordar que más del 90% de la producción nacional de cerezas se destinada a China. Por ello, cada temporada una parte de las toneladas producidas queda fuera del proceso exportador por no cumplir con los exigentes estándares de tamaño, color o sólidos solubles. Esas cerezas, que tradicionalmente son descartadas por no reunir las condiciones de vida postcosecha necesarias, ahora podrían tener un nuevo destino: la elaboración de hamburguesas.
Leíste bien: hamburguesas con pulpa de cerezas.
Innovación en cerezas
El docente e investigador de la Universidad Católica del Maule, Nelson Loyola, ha querido ir más allá en la innovación, incorporando pulpa de cerezas en la elaboración de hamburguesas.
Al respecto, señaló que esta propuesta busca dar una salida a la fruta que no se exporta y, al mismo tiempo, mejorar un alimento comúnmente asociado a la comida chatarra.
“La solución fue unir ambos desafíos en un producto innovador que reduce el contenido graso y mejora su percepción sensorial”, explicó Loyola.
El estudio incorporó distintos porcentajes de pulpa de cereza —8%, 12% y 15%— en hamburguesas formuladas con carne adquirida en supermercados. Se midieron variables como el pH, acidez, humedad, contenido graso, color y textura; además se realizaron análisis microbiológicos según la normativa sanitaria chilena y evaluaciones sensoriales con paneles entrenados.

Hamburguesas con pulpa de cerezas
Entre los resultados más relevantes, el investigador destacó una reducción de hasta un 16% en el contenido graso respecto de la hamburguesa tradicional. “A nivel sensorial, los panelistas valoraron la crocancia, el sabor agradable y la buena textura del producto, aunque algunos mencionaron un leve exceso de sal, explicable por la formulación base utilizada, similar a las del mercado masivo”, precisó.
Valor agregado a las cerezas
El académico subrayó la necesidad de avanzar en innovación alimentaria para dejar de depender de la exportación de materias primas. “No podemos seguir exportando fruta sin valor agregado. Un país se desarrolla con tecnología e innovación”, afirmó.
Agregó que la innovación fue patentada ante el Instituto Nacional de Propiedad Intelectual y actualmente se encuentra en proceso de evaluación para su escalamiento comercial.
Según Loyola, empresas del sector cárnico ya han mostrado interés, incluso con miras a su comercialización en mercados como Chile y Brasil.
“Una idea no es innovación si no es negocio”, recalcó. En ese sentido, la hamburguesa de cereza cumple con un objetivo doble: “ofrecer una opción más saludable al consumidor y rescatar un subproducto valioso para la industria frutícola” acotó.
Más allá de la exportación
Loyola enfatizó que la hamburguesa con pulpa de cereza se enmarca en una mirada más integral sobre la producción frutícola nacional, que reconoce los riesgos de depender casi exclusivamente del mercado chino. “No puede ser que un solo mercado concentre el 90% de nuestras exportaciones. Una cereza dañada puede cerrar todo el mercado”, advirtió.

Innovación en cerezas chilenas.
Esta línea de investigación, añadió, que abre oportunidades para articular sectores productivos como la fruticultura y la ganadería, especialmente en regiones como el Maule, donde ambos conviven. “En ese sentido, el producto no solo es viable a nivel técnico, sino que también representa una apuesta estratégica para la diversificación agroalimentaria nacional”, señaló.
“El consumidor actual busca alimentos innovadores, saludables y sostenibles. Esta hamburguesa podría estar perfectamente en esa línea”, concluyó el investigador.
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