Acuerdo comercial entre la Unión Europea y EE.UU. genera preocupación por su falta de reciprocidad

Las negociaciones entre la Unión Europea (UE) y Estados Unidos para alcanzar un acuerdo comercial respecto a las tarifas arancelarias continúan. Pese a los avances, desde el sector hortofrutícola europeo la preocupación se ha centrado en el carácter de “no reciprocidad” de los acuerdos alcanzados hasta el momento.
La Comisión Europea ha tomado la iniciativa de suprimir gran parte de los aranceles a productos agrícolas e industriales estadounidenses importados a la UE, incluyendo cítricos, uvas, manzanas, frutos rojos, carne de cerdo, productos lácteos, semillas y aceites, productos agroalimentarios procesados y otros productos industriales.
El objetivo de Bruselas es claro: ofrecer concesiones en sectores sensibles a cambio de que Washington suavice las sanciones sobre los automóviles europeos.
Las dos caras de la moneda: el problema de la reciprocidad
Para la Asociación Interprofesional de Limón y Pomelo de España (Ailimpo), la noticia tiene un lado positivo y otro negativo.
La buena noticia es que la reducción o eliminación de aranceles por parte de la UE a las importaciones de limones y pomelos tendrá, en la práctica, un impacto nulo. No se prevé un aumento en los volúmenes de exportación de Estados Unidos al bloque europeo, ya que la producción estadounidense se orienta principalmente al mercado interno. En el caso de los limones, este mercado es deficitario, mientras que la producción de pomelo en Florida ha disminuido drásticamente en los últimos años debido a problemas fitosanitarios.
Históricamente, Estados Unidos no exporta limones a la UE. En el caso del pomelo, los volúmenes de exportación se han reducido de manera significativa y se encuentran en niveles prácticamente insignificantes.
“Consideramos que la eliminación del arancel actual por parte de la UE (limones 6,4 %, pomelos 2,4 %) no traerá consigo ningún cambio significativo”, afirmaron desde la organización.
La mala noticia, o “pésima noticia” en palabras de Ailimpo, es que debe realizarse una evaluación de impacto sobre el cambio de política de la Comisión Europea, que en la práctica elimina el principio de reciprocidad que el sector ha defendido con tanto empeño.
“Lo más lamentable es que, con este acuerdo, la UE renuncia a defender las exportaciones europeas de cítricos a Estados Unidos, que desde hace años están sujetas a restricciones bajo protocolos fitosanitarios unilaterales impuestos por dicho país. En otras palabras, la UE renuncia a trabajar en favor de la reciprocidad. No se ha obtenido ningún compromiso por parte de Estados Unidos para revertir sus estándares proteccionistas en materia sanitaria y fitosanitaria”, señalaron desde Ailimpo.
Cabe destacar que los productos frescos estadounidenses tienen libre acceso a la UE, sin barreras ni protocolos fitosanitarios, a diferencia del acceso de frutas y hortalizas europeas a Estados Unidos. Por el contrario, desde Estados Unidos exigen aplicar tratamiento de frío a los limones Verna españoles, los cuales deben mantenerse a menos de 2,2 °C durante al menos 18 días, 16 días a menos de 1,67 °C o 14 días a menos de 1,11 °C, lo que dificulta garantizar la calidad en destino.

Fotografía de referencia | Archivo.
La alerta desde Freshfel Europa
Freshfel Europa, la asociación que representa los intereses de la cadena de suministro de frutas y verduras frescas en Europa, manifestó su profunda preocupación y perplejidad ante las concesiones asimétricas, tanto arancelarias como no arancelarias, dentro del acuerdo comercial UE–Estados Unidos.
“Más allá del impacto o beneficio comercial, este acuerdo plantea múltiples preguntas y preocupaciones sobre los principios fundamentales del comercio internacional”, indicó Freshfel Europa en un comunicado.
La asociación calificó el acuerdo como unilateral y completamente asimétrico, con concesiones que amenazan el concepto de reciprocidad: “Esta preocupante iniciativa se presentó a las empresas de la UE tras un proceso de negociación que vulneró principios básicos de buena gobernanza, dejando de lado el compromiso con la transparencia, que exige una consulta significativa a los actores interesados antes de tomar decisiones, y sin haber sido sometido a una evaluación de impacto creíble”.
Freshfel Europa advirtió que el acuerdo también debilita significativamente a la Organización Mundial de Comercio (OMC), erosionando el principio de la cláusula de Nación Más Favorecida (NMF) y otras normas multilaterales, además de deteriorar la integridad de futuros acuerdos comerciales bilaterales.
“Freshfel Europa expresa su profunda preocupación y su abierta oposición al acuerdo comercial UE–EE. UU., actualmente en proceso de implementación. A pesar de que las frutas y verduras frescas representan una parte limitada del comercio bilateral total, vuelven a ser utilizadas como moneda de cambio para lograr otros objetivos, dejando a las empresas europeas expuestas a aranceles desproporcionados y a un desequilibrio injusto en condiciones no arancelarias. Esto profundizará aún más el déficit comercial existente”.
Philippe Binard, delegado general de Freshfel Europa, señaló: “Bajo el acuerdo propuesto, las importaciones de frutas y verduras estadounidenses en la UE se liberalizan por completo, eliminando de inmediato los aranceles existentes y otorgando una exención total. Por el contrario, los exportadores europeos enfrentan un aumento significativo de los aranceles, que alcanzan el 15 % al acceder al mercado estadounidense”.
Esta asimetría otorga una ventaja competitiva a los productores estadounidenses, mientras afecta gravemente la competitividad de los productos frescos europeos al otro lado del Atlántico. Aunque los aranceles adicionales finalmente serán soportados por los consumidores estadounidenses, con el tiempo limitarán el volumen de productos frescos europeos actualmente exportados.
“La generosa medida discriminatoria de la UE, con la exención total de aranceles para productos frescos estadounidenses importados, podría motivar a otros países a solicitar concesiones similares, a la luz de la cláusula de NMF”.
Freshfel Europa también alertó sobre la falta de compromiso de Estados Unidos para resolver las medidas fitosanitarias (SPS) que han bloqueado o limitado durante décadas las exportaciones europeas de manzanas, peras, cítricos, tomates y otros productos. Estas normas continúan manteniendo fuera del mercado estadounidense las frutas y verduras de la UE, mientras que los exportadores estadounidenses podrían obtener mayor acceso al mercado europeo.
El acuerdo genera además un campo de juego desigual entre los operadores europeos, obligados a cumplir estrictos requisitos de sostenibilidad, clima y seguridad alimentaria —como CSRD, CDDD o monitoreo y reporte PEFCR—, mientras que permite a proveedores estadounidenses y de otros países no pertenecientes a la UE mayor flexibilidad o exenciones en compromisos sociales o climáticos. Esta medida socava la credibilidad de la agenda de sostenibilidad de la UE y la competitividad de las empresas europeas.
Las concesiones de la UE en materia arancelaria también tendrán importantes efectos financieros: la eliminación de aranceles para productos estadounidenses reducirá anualmente los ingresos de la UE en aproximadamente 12 mil millones de euros.
Freshfel Europa hace un llamado a la prudencia de los responsables políticos de la UE, tanto del Consejo como del Parlamento, para rechazar este acuerdo unilateral y buscar condiciones de acceso al mercado totalmente recíprocas, no discriminatorias y justas, que sean igualmente beneficiosas para los operadores europeos. De lo contrario, los compromisos de sostenibilidad de la UE y su credibilidad en el escenario global estarán seriamente en riesgo.
Los detalles finales y oficiales del nuevo acuerdo comercial entre la UE y Estados Unidos aún se desconocen. Al momento de redactar este texto, tampoco se ha establecido una fecha para el anuncio del documento definitivo por parte de los representantes de la Comisión Europea o del comercio estadounidense.
Noticia relacionada:
Tres desafíos que enfrenta la carga refrigerada en la era de los aranceles