Industria del mango en México busca nuevos horizontes ante turbulencia arancelaria en EE.UU. y los retos climáticos

Durante décadas, México ha sido el principal exportador de mango a nivel mundial, siendo Estados Unidos su mercado primario. En 2024, México exportó aproximadamente 660 millones de dólares en mango, capturando una participación significativa del mercado global.

Sin embargo, los productores mexicanos se ven obligados a adaptarse a condiciones cambiantes y diversificar sus destinos de exportación ante acontecimientos recientes, como las amenazas arancelarias de Estados Unidos y los desafíos relacionados con el clima.

Históricamente, más del 85% de las exportaciones de mango de México han tenido como destino Estados Unidos. No obstante, en 2024, las exportaciones a dicho país cayeron un 5.33% en comparación con 2023, debido a restricciones impuestas por el gobierno estadounidense y a condiciones de sequía.

Este descenso pone de manifiesto los riesgos de depender excesivamente de un solo mercado.

Fuente: USDA Market News vía Agronometrics.
(Los usuarios de Agronometrics pueden ver este gráfico con actualizaciones en tiempo real aquí)

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En respuesta, los exportadores mexicanos están explorando nuevos mercados en Europa y Asia. Una reciente misión comercial patrocinada por el gobierno visitó Francia y España, con el objetivo de introducir variedades mexicanas de mango, particularmente el Ataúlfo —conocido por su buena vida útil y dulzura— entre los consumidores europeos.

Aunque México sigue siendo un actor dominante, otros países están fortaleciendo sus posiciones en el mercado global del mango. Tailandia, por ejemplo, exportó 106,753 toneladas de mango en 2024, valoradas en 33 millones de dólares, siendo Corea del Sur su principal importador. Las exportaciones de mango de Brasil aumentaron un 46.19%, pasando de 147 millones de dólares en 2023 a 215 millones en 2024.

La Unión Europea, que importa más de 500,000 toneladas de mangos al año, representa una oportunidad significativa para los exportadores mexicanos interesados en diversificar sus mercados.

Los mangos mexicanos están ganando terreno en los mercados europeos, impulsados por su suministro constante durante todo el año y su calidad destacada.

Mango y cambio climático

El cambio climático representa una amenaza importante para la producción de mango en México.

Los patrones climáticos volátiles, incluyendo lluvias intensas en regiones como Chiapas, están afectando la floración y aumentando la susceptibilidad a plagas y enfermedades.

Estos retos exigen estrategias de adaptación, como trasladar la producción a regiones más favorables e invertir en prácticas agrícolas resilientes.

Cambios en la "mano productiva"

Los pequeños productores familiares, que cultivan parcelas de menos de 5 hectáreas, representan aproximadamente el 70% de los productores de mango en México. Reciben una porción mínima de las ganancias, frecuentemente menos del 10% del precio al por menor.

Esta disparidad económica ha llevado a que los miembros jóvenes de las familias busquen oportunidades en otras regiones, dejando a sus familiares mayores al cuidado de las fincas. Esta transición también ha dado lugar a una mayor participación de mujeres en la agricultura, lo que ha derivado en mejoras organizativas y una transición hacia operaciones más estructuradas.

Estos desarrollos destacan la resiliencia y adaptabilidad de los pequeños agricultores frente a los desafíos económicos y ambientales.

Nuevos horizontes

Para garantizar la sostenibilidad y expansión de la industria del mango en México, es imprescindible implementar una estrategia multifacética.

Diversificar los mercados de exportación puede mitigar los riesgos asociados con la dependencia excesiva de un solo país. Invertir en prácticas agrícolas e infraestructura resilientes al clima puede ayudar a adaptarse a las condiciones ambientales cambiantes. Además, se puede fortalecer la base de la industria mediante políticas que prioricen el bienestar económico de los pequeños productores.

Al adoptar estas estrategias, México puede asegurar la sostenibilidad de sus prácticas agrícolas y el bienestar de sus productores, al mismo tiempo que preserva su liderazgo en el mercado global del mango.

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