En el escenario actual con el cambio climático y la mayor incidencia de la sequía, es necesario implementar prácticas que optimicen la aplicación de agua y fertilizantes, técnica denominada fertirrigación y donde los fertilizantes usados en fertirriego son aplicados mediante sistemas de riego localizado de alta frecuencia, especialmente en riego por goteo.
La gran ventaja de la fertirrigación es que permite aplicar con alta precisión los fertilizantes y el agua en la zona de las raíces. Además, se puede controlar el nivel de fertilización según el estado de desarrollo de la planta, siendo posible monitorear y corregir deficiencias nutricionales del cultivo, usar agua de baja calidad, entre otras.
Todos estos aspectos contribuyen a un manejo sustentable del riego y permiten tener un control certero de la aplicación sin provocar daño ambiental por exceso de aplicación de agua y/o pérdida de nutrientes en la profundidad del perfil de suelo (Figura 1).
Si bien la dilución de fertilizantes en el agua es una técnica eficiente, se debe tener especial cuidado al momento de realizar la mezcla en un mismo contenedor para la preparación de la solución fertilizante. No da lo mismo mezclar todos los fertilizantes en un contenedor o separar algunos de otros.
La razón tras esta precaución es que los fertilizantes tienen distintas formas de reaccionar cuando se mezclan o se disuelven en agua, por lo que no se pueden mezclar todos los fertilizantes juntos sin correr un alto riesgo de que se formen precipitados o endurecimientos. Esta práctica podría resultar en el taponamiento de los emisores de riego, provocando así una aplicación de uniforme de la mezcla.
Para evitar este problema existen tablas de compatibilidades de fertilizantes, las que sirven para determinar si es posible mezclar o disolver en un mismo estanque dos o más fertilizantes sin riesgo de provocar reacciones químicas entre ellos (Cuadro 1).
Como regla general, se debería tener dos estanques separado para la disolución de fertilizantes: un estanque A donde se disuelven los fertilizantes sin calcio (nitrato de potasio, fosfato monoamónico, cloruro de potasio, urea, nitrato de amonio, sulfato de potasio, ácido fosfórico, sulfato de magnesio) y un estanque B para disolver fertilizantes sin fosfatos ni sulfatos (nitrato de potasio, nitrato de magnesio, urea, nitrato de calcio, nitrato de amonio, ácido nítrico).
Otra característica deseable de los fertilizantes usados en fertirriego es su solubilidad, o su capacidad para disolverse en un volumen de agua a una temperatura determinada. Se deben seleccionar fertilizantes de alta solubilidad.
RECUERDE: El fertirriego optimiza el uso de agua y fertilizantes para obtener resultados óptimos en el crecimiento, rendimiento y calidad de los cultivos, siempre que cuente con un diseño adecuado del sistema y un monitoreo regular de los niveles de nutrientes para ajustar las dosis según sea necesario.
- Distribución contratada y eficiente de nutrientes
- Adaptabilidad a las necesidades cambiantes de los cultivos
- Utilización óptima de recursos
- Reducción de la contaminación
- Mejora de la productividad
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