Investigadores de la Universidad de Talca lograron desarrollar un sistema para predecir la incidencia de la pudrición por ojo de buey en manzanas, el que ofrece más de un 90% de efectividad.

Esta enfermedad afecta principalmente a las manzanas de la variedad Cripps Pink, como también a otras variedades de cosecha tardía.

José Antonio Reyes, Director Ejecutivo de ThinkAgro comentó a PortalFrutícola.com que han podido evidenciarr que la infección causada por el hongo Neofabraea alba “ya está afectando a otras variedades nuevas de manzanas.”.

Esta innovación funciona aplicando modelos de inteligencia artificial para encontrar patrones o relaciones entre el clima y la aparición de la enfermedad en distintas temporadas y en diferentes sectores geográficos, explicó Reyes.

“Nosotros observamos que la enfermedad aparece temporada a temporada de manera distinta. Diferentes porcentajes de fruta presenta síntomas y en distintos tiempos de postcosecha”.

El investigador precisó que durante las temporadas se han observado infecciones a los 30 días de la cosecha, como también a los 90 días o hasta los 120 días.

“Lo que nosotros estudiamos con estos modelos es encontrar relaciones complejas entre variables climáticas que enfrentó esa manzana cuando estaba en el árbol y en tratar de encontrar - en base a esa información - cómo es el pronóstico de la enfermedad; si va a aparecer o no y cuando va a hacerlo”, sostuvo Reyes.

“El problema de esto es que cuando se embala la fruta no tiene nada, pero cuando va camino a destino es cuando empiezan a aparecer los síntomas”, agregó. 

El director ejecutivo de ThinkAgro indicó que con la información de cuándo aparecerá la enfermedad y en que medida, el productor puede decidir cómo enfrentar esa variable, pudiendo aplicar un producto o tomar medidas de comercialización, como vender la fruta en un menor plazo.

“La enfermedad no aparece de inmediato, entonces [en caso de aparecer la enfermedad] se pueden aplicar medidas para asegurar que las manzanas se pueden guardar por 3 o 4 meses”.

“Predecimos al 90% el nivel de incidencia de la enfermedad a los 90 días mostrando en qué rango estará”, indicó el representante de ThinkAgro.

Esta iniciativa se encuentra en un periodo de validación, sin embargo, Reyes detalló que se están generando reportes semanales, los que a futuro indicarán a los productores cuál será el comportamiento postcosecha de las manzanas mientras están en guarda.

“Terminamos la primera etapa de desarrollar el modelo y ahora estamos en la validación inicial con algunas empresas exportadoras”, aseguró el investigador.