Argentina: Pese al crecimiento, la fruticultura está en jaque por la suba de costos

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Argentina: Pese al crecimiento, la fruticultura está en jaque por la suba de costos

Productores de diversas provincias temen que su rentabilidad caiga aún más. En 2011 se creció 20% en toda la cadena.

Buen nivel de actividad, más producción, costos más elevados, caída de rentabilidad. Esta es la ecuación económica que tuvo en 2011 el sector frutícola en el país. Para 2012, el mejor escenario esperable es que las cosas sigan igual. En un contexto en el que la demanda externa se verá afectada por la crisis global en los principales mercados de exportación (Italia, España, Países Bajos, Estados Unidos) y con Brasil andando a ritmo más lento, las cosas se pondrán difíciles.

El año terminó con un crecimiento promedio de 20% en toda la cadena productiva de las frutas. Pero ya en los últimos meses, el alza de los costos -entre 25% y 28%, según los mercados- fue mitigada mínimamente por la suba marginal en los precios internacionales -2,8% promedio. La situación encendió algunas luces de alarma en el empresariado, que se queja de una caída en su rentabilidad.

Un informe de IES Consultores destaca que el negocio exportador de frutas "atraviesa un momento difícil por el aumento de costos internos, que reduce la rentabilidad sectorial en todos los eslabones de producción, y ha comenzado a generar pérdidas, obligando a algunas empresas a suspender operaciones, por lo que siembra dudas sobre lo que puede ocurrir en 2012".

Según el estudio, la situación que atraviesan compradores como la Unión Europea y Brasil resiente la demanda externa de los principales destinos de exportación, hecho que agrega una complicación adicional al problema de rentabilidad.

Alejandro Ovando, director de IES Consultores señala que "cada vez más se ven luces amarillas, en especial en los cítricos, por los elevados costos". Pese a ello, afirma que el sector frutícola tendrá este año un récord en exportaciones. "Proyectando lo que falta de 2011, en valores, las exportaciones llegarán a los US$ 1.155 millones, con un superávit comercial de US$ 978 millones". Pero el horizonte no está calmo ya que si el dólar a nivel internacional se mantiene en los niveles actuales, vamos a tener complicaciones, porque un dólar fuerte perjudica a los commodities.

"En los últimos años se está produciendo un deterioro de los ingresos, producto del proceso inflacionario de nuestros costos, lo que ocasiona una creciente pérdida de competitividad en los mercados externos y, con ello, de rentabilidad de toda la cadena agroindustrial", aclara Oscar Martin, presidente de la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI), que agrupa en especial a productores de peras y manzanas del Alto Valle.

El empresario recuerda que los costos de empaque y logística superan lo previsto y dice que siendo una actividad no formadora de precios, no se espera que los precios suban. Por el contrario, "en función del contexto internacional, es altamente probable que bajen", dijo.

Estimaciones del Instituto de Desarrollo Rural (IDR) de Mendoza proyectan para 2012 una caída de 100.000 toneladas en la cosecha de frutas, lo que llevó a empresarios del sector a alertar sobre la posibilidad de "rentabilidad negativa" y solicitar asistencia al nuevo gobierno provincial. Desde la Asociación de Productores, Empacadores y Exportadores de Fruta Fresca de Mendoza piden quitar los derechos de exportación (5%) y subsidios para fletes y servicios de frío.

Para completar el cuadro, la producción de frutas finas de la Patagonia se vio afectada este año por las cenizas del volcán Puyehue y la mortandad de casi la mitad de las colmenas de abejas, que contribuyen a la fertilización de las plantas. Los datos positivos están por el lado de los arándanos, las cerezas en las fincas mendocinas -han tenido un año récord- y la sólida demanda de Rusia.

Pero productos emblemáticos como manzanas y peras deben lidiar con la competencia de Chile, Sudáfrica y Nueva Zelanda, que desde hace años vienen ganando productividad. Así, de cara a la próxima campaña, están en riesgo inversiones y empleos.

Un informe del Ieral sostiene que el sector frutícola necesita una reconversión productiva en algunos segmentos para optimizar los rendimientos y competir mejor en mercados que, pese a una demanda sostenida, se han vuelto muy exigentes. La baja densidad y la edad de las plantaciones junto a una tecnología de producción obsoleta generan, a su entender, "una productividad deficiente", que es necesario revertir.

Fuente: Los Andes

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