Será a través de dos operatorias: Frutas en las escuelas y Frutas para todos. El objetivo es colocar los calibres más chicos que hasta ahora se destinaban en buena parte a industria, mejorar el precio recibido por el productor primario y bajar el pagado por el consumidor.

Luego del reparto de subsidios directos entre los productores por 40 millones de pesos, el Ministerio de Agricultura de Nación comenzó a hacer explícitos algunos instrumentos adicionales de política sectorial. Se trata de dos operatorias pero con un objetivo común: mejorar el precio que reciben los chacareros por la fruta que no tiene calidad de exportación, una asistencia para los productores que tienen mayor debilidad sistémica.

La temporada que pasó, de acuerdo a diferentes fuentes, entre ellas el Senasa, se destinó a molienda entre el 40 y el 44%  de la fruta cosechada. Los técnicos de Nación que trabajan en la región, al igual que los chacareros, consideran que buena parte de esa fruta que fue a industria tiene calidad comercial para el mercado interno.

Lo que propuso Agricultura fueron dos operatorias “Frutas en los escuelas” y “Frutas para todos”.

Para las escuelas

En el caso de frutas en los colegios la idea es retomar la vieja idea de reemplazar las golosinas de las viandas por frutas. Según señaló un funcionario de Nación a E&E, pronto se comenzará con pruebas piloto de distribución, aunque reconoció que aún restan superarse algunos problemas de logística.

Con esta idea en mente, Nación encargó a algunas de las cámaras de productores que realicen un cálculo de costos de jaulas de 20 kilos de fruta, de madera no reciclable, puestas en Buenos Aires, con fruta lavada, pero no encerada. Los números propuestos por 7 cámaras fueron de entre 55 y 60 pesos por jaula, con lo que se estima que podrá quedar para la fruta un valor de entre 1,30 y 1,50 pesos por kilo, amén de la posibilidad de intervenir en el total del proceso de agregación de valor.

La promesa para las cámaras de productores es que inicialmente se comprará un camión semanal por cada cámara o grupo de productores (ver aparte). Cada camión carga 1.000 jaulas o 20 toneladas. La idea es que este flujo crezca hasta 3 camiones semanales. De esta manera, fruta que antes terminaba pagándose a valor marginal, unos pocos centavos el kilo, y muchos meses después de entregada, se cobrará ahora a un valor rentable y con un plazo máximo de 45 días desde el momento de la carga. Quienes pagarán serán las provincias que adquieran esta fruta para sus escuelas.

Respecto de la calidad demandada, el acuerdo es compran los calibres 113, 125 y 138 de frutas de pepitas que no estén lastimadas. Recuérdese que los calibres que se venden más caros son 88,100 y hasta 113 (el número indica la cantidad de frutos que entran por caja).

Logística local

Estas ventas suponen una cierta logística por parte de los productores. Una parte es el frío, lo que se ata con los programas de financiar infraestructura a través de las intendencias. Y también de aprovechar la infraestructura ya financiada.

El intendente de Campo Grande, Ariel Rivero compró bins, un auto-elevador y los ofreció junto al servicio de frío del frigorífico construido en la ciudad con dinero de Nación, el que se espera continuar ampliando. También pidió que los productores hagan un esfuerzo y guarden fruta en este frigorífico, sean o no socios . La Municipalidad, además, contratará un gerente para la administración.

Un problema adicional es la separación de los calibres, pues no es una tarea fácil separarlos en la chacra. Es difícil apartar unos calibres para un comprador y otros para otro, por lo que el proyecto parece estar dirigido a los productores con mayores problemas de calidad. Es probable que a quienes tienen abundancia de buenos calibres, no le cierren los números.

Otro punto crítico, por la naturaleza de los productores involucrados, es el capital de trabajo para el enjaulado. En Campo Grande, por ejemplo, se decidió dejar en la cámara el 10 % de la porción de los 40 millones de pesos del “fondo rotatorio” que le toca al municipio. El objetivo es destinarlo a capital de trabajo y como crédito a los productores que quieran participar de este negocio.

“Fruta para todos”

La otra pata del proyecto de Nación es facilitar la comercialización directa en la región. La idea es que cada municipio proporcione un lugar donde asista mucha gente para que funcione como una feria. El punto de venta, explican, debería estar lejos de lugares comerciales para no irritar a los comerciantes. Estas ventas comenzarían a realizarse a partir del 10 de marzo. La propuesta es que se comercialicen bolsas de 3 kilos de peras o manzanas a un valor de 10 pesos. El 10% de las ventas se destinaría a pagar los gastos del camión que trae la fruta y la seguridad. Con esta operatoria se cumplirá el doble propósito de mejorar el precio primario y de reducir el pagado por el consumidor.

Reciprocidad

Si bien se adelantó que las compras se harían para todas las cámaras, E&E pudo saber que no será así. Los beneficiarios serán las cámaras de Campo Grande, Allen, Fernández Oro, Cervantes, Río Colorado, Lamarque y Luis Beltrán. También se sumarán dos cooperativas, “La Chacra”, de Cipolletti, integrada, entre otros, por Eduardo Artero y Susana Álvarez, y “Los del sur” de Villa Regina.

Se trata, precisamente, de los sectores afines a la Secretaría de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar que facilitaron el desmembramiento de la Federación de Productores y el pase al olvido del extinto Plan Frutícola Integral. Faltó Valle inferior, pero allí resultaría difícil juntar la cantidad de fruta mínima para la operatoria.

Fuente: La Mañana Neuquén