El desabastecimiento de combustibles produjo un retraso en la recolección de la fruta.

La paralización de transportistas no sólo afectó negativamente al turismo de Grecia, ya que los productores de uva también debieron afrontar el desabastecimiento de combustibles, lo que generó un retraso en la cosecha al no poder realizar las faenas.

"Nos enfrentamos a una catástrofe ya que no podemos cargar nuestros productos", afirmó George Gavalas de Heraklion Agricultural Association a Euronews. "Tuvimos que parar la cosecha. Las uvas continúan madurando sobre lo óptimo y, como resultado, no podremos venderlas", aseguró el productor.

Pese a que la huelga terminó este lunes, los productores siguen preocupados ya que la crisis aún no se termina del todo. Los transportistas amenazaron con volver a movilizarse si es que no llegan a acuerdo con las autoridades.

"Damos fin a la huelga, mostrando responsabilidad, con la condición de que se levante la movilización civil y que se inicie un diálogo. Si el Gobierno no cumple con su palabra, volveremos a las huelgas", afirmó Yorgos Tzortzatos, Presidente de la Unión de Propietarios de los Camioneros, a través de un comunicado de prensa leído ante diversos medios de prensa y citado por ABC.es.

Cerca de 33 mil transportistas mantuvieron la huelga durante siete días. El conflicto estalló luego de que el Gobierno griego decidiera liberalizar el sector, ya que está cerrado a nuevos permisos desde hace más de 30 años. De acuerdo a lo explicado por medios internacionales la abolición del sistema es una exigencia de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional. Actualmente el sector cuenta con aproximadamente 33 mil licencias.

Fuente: Portal Frutícola

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