Ayer se llevó a cabo el segundo y último día del Congreso Internacional ACADES 2024, ‘Nuevas Fuentes de Agua para Chile’. En esta oportunidad, paneles de expertos presentaron historias de éxito en países pioneros en seguridad hídrica.

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Siguiendo el foco del evento, la desalinización del agua, Carlos Cosin, CEO de Almar Water Solutions indicó que existen, a pesar de estar aprobada y optimizada, cuatro barreras que no permiten que la desalinización avance como debería.

“Primero, no hemos sido capaces de compartir el mensaje medioambiental de la forma adecuada”, dijo Cosin. “Mucha gente, incluyendo autoridades creen que la desalinización crea un residuo tóxico, sin embargo, no lo es, es simplemente sal”.

Explicó que en cada país donde han implementado un programa de desalación, se han realizado estudios de impacto ambiental que muestra que el proceso se genera sin impacto.

Sin embargo, estudios sobre los efectos de las plantas desalinizadoras han descubierto que, sin las medidas de mitigación adecuadas, "las plantas desalinizadoras tienen el potencial de dañar el medio marino a través de la introducción de grandes cantidades de salmuera y otras sustancias en el agua".

Cosin indicó que cuando en los países no se pueden permitir inversiones con presupuestos del estado, y sin garantías para la inversión extranjera, se genera una barrera financiera.

“No obstante, hay ejemplos en el mundo que prueban que eso no debería ser un problema. En Argelia, donde el utility que recibía el agua, ni el ciudadano común podía pagarlo, se puso como garante a dos compañías del estado y pudimos construir cuatro plantas inicialmente, para llegar hoy en día a 12 que no han generado ningún problema”, dijo Cosin.

Las barreras regulatorias, “solo se pueden saltar si hay voluntad política, y es muchas veces lo que nos falta”, dijo Cosin.

Aseguro que si hay voluntad política, se puede lograr regulaciones más globales.

“A pesar de los obstáculos, este año se han contratado 27 plantas desaladoras de más de 50 mil metros cúbicos al día, y aproximadamente 40 plantas de más de 10-20 mil metros cúbicos por día en rehusó”, dijo Cosin. “Combinado, hemos llegado a la capacidad contratada de recursos no convencionales de 370 mil millones de metros cúbicos al día, cuando yo empecé estábamos en el rango de 50-60 mil”.

La importancia del Congreso ACADES, según Cosin, es que en países que todavía tienen cierta resistencia a la desalinización como Chile, se puede educar y generar confianza, tanto desde la gente en la industria como las autoridades.

Australia como ejemplo de políticas públicas

 El embajador de Australia en Chile, Todd Mercer compartió las iniciativas del gobierno central de Australia con respecto al uso eficiente del agua, para hacer uso de la misma de manera sostenible y productiva.

Una fuente de riego central, Murray- Darling abastece a las principales áreas de producción de alimentos de Australia. Esta cuenca es administrada por los cuatro estados con las economías más grandes.

“La iniciativas a nivel nacional de desarrollo del agua lo creó el gobierno central en 2004, el cual representa un compromiso transversal para reformar la manera en que gestionamos el agua”, dijo Mercer.

Como respuesta a los devastadores efectos de la sequía del milenio en Australia, ya es el continente más seco del mundo con un 70% de la superficie árida o semiárida, la política nacional busca la sostenibilidad y mejora del uso del agua, con el objetivo de proporcionar seguridad hídrica a largo plazo para comunidades rurales y urbanas.

“Además, se enfoca en crear nuevas fuentes de agua sin perjudicar la producción agrícola,” dijo Mercer.

Desde el 2009, se impulsó de manera intensiva la construcción de diversas plantas desalinizadoras en el país, las cuales previamente eran construidas únicamente para minería y centrales eléctricas.

“El enfoque cambió para reducir la dependencia de fuentes en base a agua de lluvia mediante el apoyo a proyectos de infraestructura e investigación en áreas como la desalación, reuso de agua y reciclaje del agua,” dijo Mercer.

Hoy en día en Australia existen alrededor de 270 plantas desaladoras, la mayoría de pequeña escala ya que se utilizan en mayor proporción para suministrar agua potable a islas y áreas remotas del interior al igual que procesos industriales y riego de campos deportivos y usos agrícolas.

Israel; un ejemplo de éxito

 Una de las presentaciones más anticipadas del evento fue la de la Presidenta de la Sociedad de Desalinización de Israel, Miriam Brusilovsky quien compartió la historia de éxito de Israel con el uso eficiente del agua, particularmente en cuanto a la desalinización.

Más del 55% del agua potable en Israel viene de la desalinización.

A pesar de que Chile se encuentra muy lejos de llegar al uso eficiente de agua en Israel, Brusilovsky dijo que, “ver los pasos que está tomando Chile, y el gran esfuerzo que está haciendo ACADES me recuerda a cuando se formó la Asociación de Israel donde tuvimos que ayudar y dar nuestro grano de arena para que se tomarán decisiones”.

Con orgullo, Brusilovsky compartió que, a día de hoy, Israel puede decir que la misión de asegurar el recurso hídrico se cumplió. Gracias a esto, la Asociación se utiliza hoy en día para educar a las nuevas generaciones para generar nuevos expertos que lleven a cabo este trabajo.

Es importante destacar, que los proyectos de esta magnitud son a largo plazo, tal como ocurrió en Israel donde se empezó con una visión, seguida por toma de decisiones importantes, planeamiento y ejecución.

Para ello, es importante educar a las personas que toman decisiones. Según Brusilovsky, “a contrario de lo que pasa en Chile, lo que marcó la diferencia para Israel fue la consciencia desde temprano que el país se encontraba en una zona con recursos hídricos limitados”.

La falta de consciencia es un tema que se repite reiteradamente entre los presentadores del Congreso, particularmente en Chile. El país, especialmente en aquellas regiones más vulnerables se demoraron mucho en actuar en base a la realidad de que sufrirán por la escasez hídrica.

“La economía chilena no puede sobrevivir sin agua, porque no puede sobrevivir sin la agricultura que depende del agua directamente”, dijo Brusilovsky.

La directora aseguró que hay que considerar el agua como lo que es, un suministro muy, muy valioso.

Para cuidar el recurso, la industria agrícola de Israel reutiliza las aguas servidas en un 90%.

“En Israel se logró masificar la desalinización, no sin antes tomar decisiones con riesgos”, dijo Brusilovsky. “Sin embargo, la necesidad que existía por el agua a nivel social era lo más importante, y como todos sabemos, la necesidad es la madre de la creatividad”.

Cerro dejándole un mensaje a Chile, deseando que puedan entender que existe una necesidad, porque la sequía que tiene el país llegó para quedarse.