Para conocer los detalles y la mirada de la industria de kiwi a nivel mundial, conversamos con Carlos Cruzat, presidente del Comité del Kiwi de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (ASOEX), para conocer los planteamientos de la 42ª convención de la International Kiwifruit Organization (IKO) que se llevó a cabo en Chile.

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La International Kiwifruit Organization (IKO), es la reunión anual donde se reúnen los países productores y exportadores de este cultivo, para analizar la industria global. Cruzat indicó que durante el encuentro se analizó y se intercambió información de la tendencia de crecimiento en cada país, los volúmenes que se van viendo como tendencia y los aspectos fitosanitarios y legales que puede estar afectándolos. O aquellas dificultades que pueden estar teniendo en algunos mercados, que se puedan abordar desde la cooperación.

Cruzat indicó que “el encuentro lo realizamos en Curicó, porque es la zona donde se produce la mayor cantidad de kiwi en Chile y por lo tanto aprovechamos de que fuera físicamente donde se producen la fruta. Tuvimos dos días de trabajo en sala y visitamos una central frutícola para mostrar la tecnología que se utiliza en Chile para almacenar y procesar la fruta. También fuimos a ver huertos de distintas edades para conocer su situación productiva”.

Entre los participantes, agregó que contaron con “Italia, Grecia, España, Portugal, Francia, Estados Unidos, recibimos el informe de Turquía. Participó por primera vez Argentina y Brasil. Y por segunda vez Sudáfrica”.

Además, en la ocasión expuso el presidente de ASOEX, Iván Marambio, quien presentó la industria de la fruta chilena. Y el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) Antonio Walker, quien expuso sobre la agricultura y las expectativas como país. A esto se sumó una exposición del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), quienes mostraron el rol del gobierno en el apoyo fitosanitario a la industria frutícola para mantener la competitividad.

Relevancia

El presidente del Comité del Kiwi comentó que “estamos incorporando la mayor cantidad de países, para tener una visión global y cooperar cuando existan necesidades, como por ejemplo los temas fitosanitarios, como pasó con la PSA, que fue de mucha utilidad para buscar cooperación en otros países”.

Y añadió que “se ve un crecimiento significativo de las plantaciones de kiwi amarillo y un aumento en su consumo, quedando un espacio para el kiwi verde. En cuanto al kiwi amarillo, todavía Nueva Zelanda es el país que maneja el mayor volumen tanto en el hemisferio norte y sur”.

A esto agregó que se observa un crecimiento de la demanda por esta fruta, por la vitamina C y los beneficios que aporta a la salud.

Desafíos

Los países productores y exportadores expusieron los desafíos que enfrentan de cara a los próximos años. “Cada país tiene realidades distintas, Europa por ejemplo tiene que renovar algunos huertos viejos. Italia tiene un problema con las plantaciones porque tiene una enfermedad que tiene que trabajar con los suelos. Grecia está creciendo mucho el volumen de verde, todavía le falta la estructura frigorífica para poder absorber el volumen”, señaló Cruzat.

Explicó que Chile está renovando las plantaciones “y lo que necesita es incorporar nuevas variedades y estamos trabajando a pesar de que nuestra limitación más grande es Verticillium”.

Además, indicó que Nueva Zelanda está disminuyendo plantaciones de kiwi verde y creciendo más en amarillo. “Uno de los principales desafíos es el cambio climático, la condición que ellos han tenido está cambiando más, por lo tanto, están siendo precavidos en estudiar y revisar lo qué está pasando en otros países, para reaccionar con tiempo”.

Cruzat expresó que “tenemos el desafío común de aumentar el consumo, aprovechar este momento en que hay una alta valorización del tema de la vitamina C y el kiwi. Buscar mejor eficiencia en el caso de Chile en el almacenaje a la fruta, para tener un período de mejor guarda. Las nuevas plantaciones tienen que venir con un manejo moderno, no mantener las mismas tecnologías que usábamos antes”.

Consultado respecto a la situación del kiwi amarillo en Chile, mencionó que por ahora es muy incipiente, “ya que actualmente tenemos un 2% de la superficie del cultivo, es muy poco, no hemos tenido buenos resultados. Por lo que tenemos que trabajar en la parte fitosanitaria del kiwi y sobre todo traer variedades nuevas y probarlas”.

Proyección del kiwi

Como una de las conclusiones del encuentro, se observa que en general está creciendo la oferta en un buen ritmo respecto de la demanda. “Grecia ha crecido significativamente sus últimos 10 años, con mucho volumen. Hay que tener cuidado en la calidad de la fruta, para tener un precio más alto”.

Explicó que si parten de un precio muy bajo, con un alto volumen, lo que se prevé es una caída del mercado. “Y la manera de mantenerse en el mercado competitivo, es producir fruta de muy buena calidad. No importa qué pase con los volúmenes que tienden a ser al alza, debe acompañarse con una muy buena calidad, para mantener la posición de buena demanda. De lo contrario, pasa a ser un producto reemplazable, poco atractivo y por lo tanto el negocio se empeora”, dijo Cruzat.

Concluyó que “todas las plantaciones nuevas deben tener una mirada de mayor eficiencia productiva, mayor cantidad de kilos, con mejor almacenaje, más barato de almacenar y con el mejor sabor al momento de consumo, para que el consumidor esté feliz de pagar un buen precio. Si no, terminas vendiendo por defecto en un valor que no es rentable en el largo plazo”.