¿Por qué consumir frutas y verduras? Estas proporcionan vitaminas, minerales y fibra. Una dieta rica en frutas y verduras puede ayudar a los niños a crecer y a combatir las enfermedades. Además los protege contra las insuficiencias cardíacas, derrame cerebral, hipertensión arterial y posiblemente algunas formas de cáncer. La fibra y el agua en las frutas y las verduras ayudan a sentirse satisfechos y a evitar comer de más, señala el Centro de Investigación Preventiva de la Facultad de Salud Pública de Harvard University y 5aldía.org.

Cómo incrementar las frutas y verduras en la dieta de su familia

Como padres se tiene la mayor parte del control sobre lo que consumen los hijos —o por lo menos sobre los alimentos entre los que pueden elegir. Usted desempeña un papel importante para crear hábitos de alimentación sanos, comprando y preparando alimentos saludables y programando las comidas y refrigerios.

Aquí, unos consejos simples para que sus hijos aprendan a disfrutar de las frutas y verduras.

- Presente las verduras y las frutas en etapas tempranas (durante la infancia y los 2 primeros años) y continúe sirviéndolas frecuentemente. ¡La repetición es la clave, por lo tanto no se rinda!

- Esté preparado. Siempre mantenga en el refrigerador una selección de frutas y verduras cortadas para consumir como refrigerio. Consérvelas en contenedores transparentes al nivel de los ojos.

- Sirva una verdura o una fruta en cada comida y refrigerio, incluyendo los alimentos que se envían a la escuela.

- Agregue verduras extra a las comidas que se elaboran en casa o a las comidas preparadas.

- No abuse de los jugos. El jugo que es 100% fruta es saludable, pero no sustituye a una fruta fresca. Limite el jugo a 12 onzas (350 mililitros) por día a niños de más de 6 años de edad y sirva sólo 4-6 onzas (120-180 mililitros) por día a niños de 6 años de edad y menores.

- Sirva frutas como refrigerios y postre—intente mezclar fruta congelada en los licuados.