El Departamento de Agricultura de EE.UU. invertirá 178 millones de dólares en siete proyectos de desarrollo internacional en cuatro continentes para apoyar las prioridades del gobierno de EE.UU., incluyendo la promoción de la agricultura climáticamente inteligente, facilitar el comercio y abordar las causas fundamentales de la migración en América Central, anunció hoy el Secretario de Agricultura Tom Vilsack.

Los fondos se conceden en el marco del Programa de Alimentos para el Progreso, a través del cual el Servicio Agrícola Exterior del USDA se asocia con organizaciones no gubernamentales y gobiernos extranjeros en proyectos que ayudan a los países en desarrollo a fortalecer sus sistemas agrícolas e impulsar su capacidad comercial.

Los premios de este año forman parte de la inversión de 2.000 millones de dólares para reforzar la seguridad alimentaria mundial, anunciada por el Presidente Joe Biden. en la Asamblea General de las Naciones Unidas.

"Alimentos para el Progreso" es una piedra angular de los esfuerzos de creación de capacidad internacional del USDA. Este año, cuando salimos de una pandemia mundial y nos enfrentamos a los retos del aumento del hambre y la pobreza, el cambio climático y las consecuencias mundiales de la brutal guerra de Rusia contra Ucrania, este trabajo es más importante que nunca", dijo Vilsack. "Al asociarnos con organizaciones del sector privado, gobiernos locales y productores y empresas locales, estamos ayudando a construir sistemas alimentarios más equitativos y resistentes, a impulsar de forma sostenible la capacidad de producción para combatir la inseguridad alimentaria y a aumentar los ingresos de los agricultores, al tiempo que mejoran su capacidad de mitigar y adaptarse al cambio climático."

A través de Alimentos para el Progreso, el USDA dona productos agrícolas estadounidenses a entidades que reúnen los requisitos necesarios, como organizaciones voluntarias privadas y gobiernos extranjeros, que luego venden los productos en el mercado local y utilizan los ingresos para apoyar programas de desarrollo agrícola, económico o de infraestructuras.

Este año, el USDA donará 240.000 toneladas métricas de productos básicos, por valor de 129,6 millones de dólares, para lo siguiente:

• Apoyar la estrategia de la Administración Biden-Harris para abordar las causas fundamentales de la migración en la región del Triángulo Norte de El Salvador, Guatemala y Honduras, centrándose en la producción agrícola sostenible e inteligente con respecto al clima, la facilitación del comercio y la integración de la cadena de suministro;
• Mejorar los medios de vida de 60.000 hogares productores de café en zonas de Burundi que se han visto amenazadas por el cambio ecológico y el limitado crecimiento económico;
• Aumentar el rendimiento de las especias en Jamaica en un 50%, al tiempo que se impulsa la capacidad de procesamiento y exportación, a través de un enfoque basado en sistemas y centrado en la producción climáticamente inteligente;
• Abordar la inseguridad alimentaria en Malawi a través de un proyecto que impulsará la producción y la rentabilidad de 35.000 explotaciones agrícolas mediante la aplicación de prácticas agrícolas sostenibles y escalables e inteligentes desde el punto de vista climático;
• Ayudar a los productores de cacao de Nigeria a aumentar su capacidad de producción y a reducir su huella climática, al tiempo que se implementa un proceso de trazabilidad en toda la cadena de valor del cacao;
• Aumentar el rendimiento y los beneficios de 12.000 productores de especias en Perú apoyando su resiliencia mediante prácticas de producción climáticamente inteligentes; y
  Promover la adopción de prácticas de producción climáticamente inteligentes por parte de 30.000 agricultores en Tailandia mediante la creación de un centro de conocimiento regional.
  Los siete nuevos proyectos de Alimentos para el Progreso financiados por el USDA en 2022 se suman a los 41 proyectos actualmente en marcha en 38 países. Para saber más, consulte la lista completa de premios de Alimentos para el Progreso 2022.

El USDA está transformando el sistema alimentario de Estados Unidos con un mayor enfoque en la producción de alimentos locales y regionales más resistentes, promoviendo la competencia y mercados más justos para todos los productores, garantizando el acceso a alimentos seguros, saludables y nutritivos en todas las comunidades, construyendo nuevos mercados y flujos de ingresos para los agricultores y productores que utilizan alimentos y prácticas forestales climáticamente inteligentes, haciendo inversiones históricas en infraestructura y capacidades de energía limpia en las zonas rurales de Estados Unidos.