El arándano es un cultivo muy sano en cuanto a plagas se refiere y la mayor parte de los controles están enfocados a controlar plagas cuarentenarias, debido a que su presencia impide la exportación. Los controles de las plagas de los arándanos se basan principalmente en prácticas culturales y aplicación de agroquímicos.
Uno de los más polífagos es el cabrito de la frambuesa. La larva en sus primeros estados se alimenta de raíces y raicillas para después horadar la raíz principal en dirección al cuello, donde construye su cámara pupar.
Los huevos son puestos en la zona del cuello, luego las larvas eclosan y se dirigen a las raíces, causando severos daños en esa zona desde septiembre hasta diciembre, después de un breve receso en enero y febrero, reanudan su ciclo en marzo en forma de pupa hasta septiembre (en el hemisferio norte).
Es difícil de detectar pues el consumo de follaje lo realizan durante la noche. La oviposición ocurre en septiembre y las larvas permanecen un año en el suelo. También es posible encontrar adultos durante todo el año, invernando bajo terrones.
Esta especie es poco común en frambuesa, mientras que en arándano tiene gran importancia. El adulto puede medir hasta 2 cm. de longitud, siendo las hembras de mayor tamaño y de cuerpo más redondeado que los machos. El color del cuerpo es gris, con bandas claras o amarillentas a lo largo.
Afectan también al arándano el gorgojo de los invernaderos (Otiorhynchus sulcatus), el capachito de los frutales (Asynonychus cervinus) y Aegorhinus nodipennis, sobre este último insecto, puedes leer un artículo completo: "Ciclo y actividad estacional de Aegorhinus nodipennis: en huertos de arándanos".
Figura 1. Biología y comportamiento de A. nodipennis en arándano.
La competencia que ejercen normalmente las malezas con las plantas cultivadas por el agua, luz y nutrientes, cobra primordial importancia en el caso de los arándanos debido a su sistema radical superficial y carente de pelos radicales.
Dado este alto grado de competitividad es muy importante realizar un adecuado control previo a la plantación, especialmente si el suelo está infestado con malezas perenne, donde algunos herbicidas que son efectivos en su control y que no dañan arándanos adultos si lo hacen con plantas jóvenes.
Se ha determinado que plantaciones con una alta y permanente presión de malezas pueden demorar el doble en alcanzar la plena producción que aquellas que se mantienen limpias.
Existen algunas malezas que pueden hallarse en baja cantidad, pero que, debido a su agresividad y favorecidas por un mal manejo, tienen un gran potencial para incrementar sus poblaciones, pasando a predominar y afectar de manera notoria el rendimiento del cultivo.
En este grupo están, algunas malezas perennes, como chufa (Cyperus eragrostis), pata de laucha (Rorippa sylvestris), correhuela (Convolvulus arvensis), falso té (Bidens aurea) y pila – pila (Modiola caroliniana), razón por la cual es conveniente controlarlas apenas aparecen los primeros ejemplares.
Durante el primer año el control sobre la hilera debe ser manual por la sensibilidad que presentan las plantas nuevas a todo tipo de herbicidas, especialmente a los de pre – emergencia. El uso de un mulch de aserrín ayudará a suprimir las malezas.
Se utilizan herbicidas de pre – emergencia los cuales se aplican en invierno o temprano en primavera antes de que se produzca el hinchado de las yemas. El suelo debe estar húmedo, prácticamente libre de malezas y no debe ser removido después de aplicar el producto.
Se debe tener especial consideración con el tipo de malezas presente; la textura del suelo, dosificación y calibración del equipo, y protección de las plantas al momento de la aplicación. Para la aplicación de herbicidas de contacto se debe tener especial cuidado para no dañar a las plantas de arándano.
Entre las hileras se puede mantener libre de vegetación o con una cubierta vegetal natural o artificial.
El uso de una cubierta vegetal temporal o permanente presenta varias ventajas: facilita o mejora la accesibilidad de equipos y personas en todo momento dentro de la plantación reduce las posibilidades de erosión, limita la compactación del suelo por maquinarias, importante en cosecha mecánica. Su desventaja principal es la competencia por nitrógeno y humedad.
Esta cubierta vegetal debe ser manejada en base a cortes; bastando de 3 a 5 cortes en primavera verano especialmente temprano en la temporada cuando la competencia le causa mayor daño al arándano; ya que se encuentra este en un rápido crecimiento.
Un equipo de investigadores del INTA y del Conicet determinó que la revegetación con Brachiaria brizantha mejoró significativamente las propiedades de suelos degradados.
La pruina es una capa cerosa de aspecto blanquecino o grisáceo que se encuentra de manera natural en la superficie de muchas frutas, hojas y tallos.
Una nueva investigación de la Universidad de Florida muestra que los productores pueden ahorrar hasta un 67%, o hasta medio millón de galones por acre por temporada, al alternar los ciclos de riego intermitente por aspersión entre encendido y apagado, logrando el mismo rendimiento.