El precio de los cítricos se hunde, tal y como informa el diario El Mundo mientras los costes de producción se disparan. La segunda parte de campaña citrícola, en lugar de aliviar la maltrecha economía de los agricultores, provoca mayor desazón si cabe entre los productores porque a la crisis del precio de la naranja se une además el desplome de las cotizaciones de las variedades de mandarinas, incluso de las premium.

“Variedades como Nadorcott o Tango tienen unos precios por debajo de 0,60 euros el kilo y, en el caso de las mandarinas ortaniques, las cotizaciones están totalmente hundidas, con precios de entre 0,12 y 0,16 euros el kilo en Castellón, por lo que mucha fruta se está derivando a industria o incluso se está quedando en los campos sin recolectar”, explica el secretario general de La Unió de Llauradors i Ramaders, Carles Peris.

En el caso de las naranjas navel lane late, la situación no es mejor. “El precio de la naranja está hundido desde el inicio de la campaña debido a la presión de las importaciones de fruta de Sudáfrica y, en esta segunda parte de temporada la situación no ha variado, con cotizaciones de entre 0,13 y 0,15 euros kilo en Castellón, totalmente ruinosas para la navel lane late”, expone Peris.

Los bajos precios de los cítricos chocan con un aumento de costos generalizado debido a la inflación y a la guerra de Ucrania, con subidas en materias primas, transporte o energía, explica Peris.

De hecho, el desplome de las cotizaciones de la fruta en el campo están provocando una caída de la importación en el inicio de año. Así las cosas, durante los dos primeros meses del año 2022 las importaciones de naranja han sido de 40.454 toneladas, lo que supone una importante disminución del 40,2% (-7.155 toneladas) respecto a 2021 y del 49,4% (-39.521 toneladas) en relación con la media, según consta en el último boletín de seguimiento reforzado de las importaciones de cítricos por la Unión Europea que ha publicado el Ministerio.

Tanto Egipto (-57%) como Marruecos (-39%) descienden de forma significativa respecto a los valores medios. Solamente Sudáfrica crece, aunque en valor absoluto representa cantidades muy poco significativas.

En lo que concierne a la campaña 2021-2022, desde septiembre a febrero, se han importado 375.582 toneladas, lo que supone un ligero incremento del 0,8% (+3.000 toneladas) respecto a la anterior campaña, pero un descenso del 7,1% (-28.620 toneladas) respecto a la media. Sudáfrica incrementa sus aportaciones en un 15% (+32.700 toneladas), si bien Egipto y Marruecos reducen sus cantidades a menos de la mitad.

En lo que se concierne a la campaña 2021-2022, en el primer cuatrimestre se han importado 718.008 toneladas, lo que representa un incremento del 8% respecto a la campaña 2020-2021 y +6% que la media.

Por países, en términos absolutos el que más crece es Sudáfrica, que ha incrementado sus remesas en 95.800 toneladas (+36,2%) respecto a la media de dicho periodo. Argentina también lo hace un 57,6% (+22.300 toneladas), y Marruecos un 4,9% (+2.500 toneladas). El resto descienden, detalla el boletín del Ministerio de Agricultura./ Revista Mercado