Hoy 6 de agosto se conmemora el Día Nacional de la Miel, que desde 2009 busca relevar el trabajo de los apicultores chilenos y resaltar las propiedades de este producto natural.

Se trata de un sector cuyo futuro hoy está marcado por la aplicación de nuevas tecnologías orientadas a frenar la desaparición de las abejas y promover una agricultura inteligente en un contexto de grandes desafíos: para un apicultor, los cambios extremos de temperatura y la sequía que afecta al país, significan la muerte de muchas de sus abejas, un declive en los niveles de producción y un efecto inmediato en la naturaleza. 

¿Por qué es tan importante preservar las abejas? Más allá de la producción de miel, son una de las especies más relevantes en la subsistencia de los ecosistemas debido a su trabajo de polinización. Sin ellas, no existiría la biodiversidad en el mundo ni la producción de plantas y frutas.

De hecho, de acuerdo a cifras de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el 90% de la alimentación en el planeta depende de la polinización de las abejas. Sin embargo, sus tasas actuales de extinción son de cien a mil veces más altas de lo normal debido a la acción humana.

“Se estima que la producción de alimentos debe aumentar en al menos 60% para hacer frente a la demanda de cara a 2050. En ese sentido, la mejor decisión es apostar por una agricultura inteligente, que utilice la tecnología como aliada estratégica para garantizar procesos más eficientes, resilientes y amigables con el medioambiente", comentó Francisco Guzmán, director de Claro empresas.

Añadió que "la buena noticia es que la masificación de tendencias como el Internet de las Cosas (IoT) ha permitido avanzar más rápidamente en esta dirección, pero el actual desafío es seguir impulsando soluciones que nos lleven a una era de campos conectados”.

En ese sentido, han surgido soluciones enfocadas a crear colmenas inteligentes, como Beewaze. Este proyecto, 100% chileno, instala sensores en su interior para monitorear las condiciones climáticas en que están las abejas, su temperatura, humedad y peso, generando pronósticos e información histórica del lugar donde irán a polinizar.

Dichos datos son monitoreados, procesados y enviados a una plataforma web para ser visualizados desde cualquier dispositivo. Así, permite a los apicultores tomar medidas preventivas, con información en tiempo real sobre las condiciones al interior y exterior de las colmenas que permite optimizar el cuidado de las abejas, evitar su muerte y asegurar la producción de miel.

Actualmente, Beewaze continúa trabajando en mejoras para aumentar la batería y la sensibilidad de la balanza de los sensores. Además, espera expandirse a campos de otros países latinoamericanos, contribuyendo a incrementar la producción de miel local, así como al cuidado del medioambiente, aportando al aumento y fortalecimiento en la población de abejas, producción de frutas y semillas, y mejoras de bosques y flora endémica.

Así, gracias a una agricultura más inteligente, disminuirá el riesgo de extinción de esta especie, fundamental para nuestra subsistencia en el planeta.