Según información entregada por el Instituto de Desarrollo Rural de Argentina, las heladas en Mendoza podrían afectar negativamente la cosecha de carozos en la zona. 

Mendoza es la principal  zona productora de carozos en Argentina. Si bien no exportan grandes volúmenes a otros países, es un origen que – en ciertas variedades - está en crecimiento.

Por ejemplo, durante la temporada anterior, según datos de ProMendoza, la exportación de ciruelas creció un 55%. Esto, gracias a la apertura de nuevos mercados.

Sin embargo, por el momento, la exportación se dirige a países del Mercosur; y no en grandes volúmenes, según lo que señalizó a PortalFrutícola.com, el coordinador del Instituto de Desarrollo Rural (IDR), Alfredo Baroni.

Para esta temporada, Baroni aseguró que, si bien aún no hay una estimación de la cosecha; “se parte de una temporada con grandes afectaciones por heladas, por lo que es probable que se produzca una merma importante en el volumen cosechado”.

Estado actual de cosecha

Los primeros duraznos tempranos, junto con damascos y cerezas están siendo recién cosechados en la zona.

Según Baroni, en cuanto a los damascos, el IDR estimó una importante disminución. “Se espera una cosecha muy exigua de apenas 1.478 toneladas. Hace 8 años atrás, la cosecha rondaba las 20.000”.

El coordinador del IDR explicó que esto se debe principalmente a la helada tardía; pero también a “la erradicación y abandono de montes de damascos, ya que la superficie implantada se redujo a menos de la mitad en dicho periodo”.

Asimismo, Baroni explicó que un factor que puede incidir en la producción, sobre todo en duraznos, ciruelas, damascos y cerezas, es que “en algunos casos no se ha dado el recambio varietal que los tiempos actuales exigen”.

La falta de recambio varietal, según Baroni, produce que estas frutas no estén adecuadas en su mayoría para transportes largos.

Zonas más afectadas por heladas

Como se mencionó anteriormente, las heladas tardías de octubre podrían afectar negativamente a la producción en Mendoza.

Sin embargo, la afectación es diferente en cada una de las zonas. “El sur, por ejemplo, ha sido muy afectado; y no tanto el Valle de Uco”, recalcó.

También se produce diferencia en cuanto a las variedades: “Algunas se encontraban en un momento del ciclo fenológico más adelantado que otras; y en consecuencia fueron más sensibles a las temperaturas”, explicó.

Con todo, el peligro de las heladas se podría considerar terminado, ya que aun cuando existen registros de algunas que afectan hasta noviembre, es algo muy poco probable.