Una obra de regadío mediante un túnel bajo los Andes busca irrigar la costa desértica del sur de Perú, con el fin de crear 38.500 nuevas hectáreas para cultivar productos principalmente para la agroexportación.

El proyecto Majes Siguas II, emplazado en el departamento de Arequipa, contempla la construcción de un túnel de derivación de 15 kilómetros para pasar las aguas desde las cuencas del Atlántico hacia el Pacífico y así, poder regar 38.500 hectáreas desérticas de la Pampa de Siguas.

De acuerdo a información del Ministerio de Agricultura y Riego de Perú, estos trabajos se suman a los ya realizados en las Pampas de Majes, donde se crearon 16.000 hectáreas para cultivar pimiento piquillo, alcachofas, quinoa, tomate cherry y uvas.

Fotografía: Ministerio de Agricultura y Riego, Perú

Las obras para irrigar esta zona desértica, perteneciente a la cabecera norte del desierto de Atacama, considera también la construcción de una central hidroeléctrica en la zona de angostura, la que tendrá la capacidad de almacenar 1.140 millones de metros cúbicos de agua, las que luego serán derivadas mediante un túneles y bocatomas hasta llegar a las Pampas de Siguas.

Desde el Gobierno regional de Arequipa informaron a PortalFrutícola.com que las obras de perforación del túnel y la construcción del dique de la represa se iniciaron el domingo pasado y que deberían estar listas en 2021, fecha en que se iniciará la distribución de las tierras para iniciar las plantaciones.

La misma entidad confirmó que las 38.500 hectáreas serán licitadas tanto a empresas como a pequeños agricultores y que los terrenos serán divididos en parcelas de 200 hectáreas, las que tendrán un precio base de 5.500 dólares.

Respecto al uso que tendrán estas tierras, el Gobierno regional de Arequipa espera que se destinen principalmente a las agroexportaciones, con el fin de enviar los productos que se cultiven en esa zona a mercados como Asia o Europa y así intentar cubrir las demandas de algunos productos peruanos que presentan déficit en mercados como el chino.

En esa misma línea, se le sugerirá a quienes cultiven estas tierras una cartera de productos que son aptos para esa zona, considerando las características desérticas que tiene el territorio y el éxito que han tenido determinadas variedades en la Pampa de Majes.

En tanto, se espera que este proyecto aumente las exportaciones peruanas en 360 millones de dólares por año, mientras que el Ministerio de Agricultura y Riego estima un incremento del PBI agrícola e industrial de 853 millones de dólares por año, tanto por las exportaciones como por la generación energética de las centrales hidroeléctricas.

Oportunidades para otros productos

PortalFrutícola.com conversó con el presidente de la Asociación de Gremios Productores Agrarios de Perú (AGAP), Ricardo Polis, quien se refirió a la incorporación de 38.500 nuevas hectáreas a la capacidad productiva peruana y sostuvo que por las características de la zona se podrá buscar otras alternativas de productos, diferentes a los que tradicionalmente se cultivan en otras áreas de Perú.

“Desde el punto de vista climático es una zona diferente respecto al resto de la costa peruana: está entre 900 y 1000 metros sobre el nivel del mar, tiene temperaturas bien marcadas con mínimas de 5°C y máximas de 30°C en verano y mucha luminosidad”, declaró Polis.

El presidente de AGAP agregó que la industria está comenzando a hacer pruebas sobre qué productos pueden crecer en la zona y que aún hay tiempo para evaluar, considerando que las tierras estarán aptas para su uso en 2021.

Además, indicó que las nuevas hectáreas deberían dedicarse principalmente a la exportación pero que igual podrían desarrollarse productos extensivos y no sólo hortofrutícolas.

Fotografía principal: Presidencia Perú, vía Flickr.

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