EG, el sistema de conducción de uva de mesa que reduce los costos en Chile
Se implementa hace cuatro años en el país
Fue en un viaje a Brasil en octubre de 2007 cuando Nicolás Díaz Figari, Asesor Técnico de Uva de Mesa Chile conoció a un chileno radicado en el Valle de San Francisco en Petrolina, quien estaba utilizando un sistema de conducción Californiano modificado con buenos resultados en uvas blancas (Thompson Seedless).
Tras analizar el sistema – que es una adaptación del Open Glabe – le surgió la idea de adaptar el Parronal Español a éste sistema, aprovechando la estructura misma del parronal.
En entrevista con www.portalfruticola.com Díaz Figari nos contó acerca de este nuevo sistema de conducción para uvas, uno que ha implementado en Chile desde hace 4 años, y que permite ahorrar en mano de obra y disminuye los costos de producción.
Primero que todo Díaz Figari nos explicó que un sistema de conducción se define como toda estructura artificial hecha de postes (o fierros) y alambres que soportan la mayor parte del armazón de la planta.
Esto tiene como objetivo, además de darle soporte a las plantas, hacer más eficiente el manejo de luz incrementando el área foliar, producción y calidad; permitir en las uvas de mesa una separación entre follaje y fruta; distribución de la fruta; permitir eficiencia en la penetración de pesticidas en el follaje; disminuir infecciones fungosas mediante la reducción de la densidad del follaje y mejorar la ventilación del aire; y facilitar las labores culturales y reducir los requerimientos de mano de obra.
Nos indicó que en Chile se utilizan 2 tipos de sistemas de conducción. Uno de ellos es el sistema de mediana expansión vegetativa (Espaldera Californianas y Sud Africanos) y el Sistema de gran expansión vegetativa (Parronal Español), siendo este último el más utilizado en la producción uva de mesa en el país.
El sistema de conducción ideado por Díaz Figari – con la colaboración de Eduardo Pastor, Ingeniero Agrónomo Asesor en Uva de Mesa, junto con Mauricio Galvez y Sergio Araya, ambos Técnicos Agrícolas - es un mezcla del parrón Español y Gable.
Bajo el nombre de EG (Español y Gable) la modificación de Díaz Figari buscó responder a la necesidad de mayores rendimientos en las labores propias de las uvas de exportación y tener un sistema más ventilado, más iluminado y más sano para la uva.
“Más que una forma de tendencia al mercado, es una forma de bajar costos y obtener una mejor rentabilidad de las uvas y poder solucionar el tema más complicado que es la mano de obra, el recurso cada día es más escaso y su costo en alza”, dijo.
El sistema
El asesor nos explica que este consiste en levantar una estructura de parrón español ocupando un marco de plantación de 3,5” por 7,5“ para después insertar, en la sobre hilera empotrado a los centrales a 1,6 0 1,7 mts de altura, una cruceta fabricada de centrales que puede ser de pino o eucaliptus, la cual va a soportar todo el emparrillado para sostener los brotes y frutos (racimos).
Nos explicó que con el sistema hay ahorros significativos en los costos de mano de obra ya que se reduce el número de jornadas por hectárea, aumentado los rendimientos de las labores.
Además hay un adelanto de la producción. “Produce a la segunda hoja, 2000 cajas por hectárea. 3000 a 4000 cajas por hectárea en Red Globe puedes producir fácilmente al tercer año”, sostuvo.
En cuando a la densidad de la uva para exportación, Díaz Figari explicó que esta va a depender de muchos factores, principalmente del tipo de suelo, así como del uso de portainjertos, de las variedades, etc.
“De los proyectos que se han desarrollado se han plantado hasta 2000 plantas por hectáreas y ensayado 2500 plantas por hectáreas”, indicó.
“Siendo las más recomendadas para variedades podadas a pitón no más de 1700 plantas por hectáreas y para las variedades poda larga (5 a 7 yemas) unas 1200 plantas por hectáreas en condiciones de suelo medio. Sin embargo, con la llegada de nuevas variedades y el uso de patrones se necesitará más investigación en distintas regiones para ver las diferentes respuestas al uso de éste sistema”.
Efectos sobre la cosecha
“Nuestras primeras cosechas en la Variedad Red Globe fueron de 10 días más temprano que el testigo, siendo el testigo un parrón español plantado el mismo año que sólo dio 600 cajas por hectárea contra el nuevo sistema que arrojó 2000 cajas por hectárea”.
“Hemos observado que el sistema produce más temprano y fruta más clara, ya que por ser un sistema abierto se cosecha mayor cantidad de luz”.
Agregó que el sistema también puede ser cubierto con plástico para proteger las uvas tardías de las lluvias de marzo-abril en la zona central de Chile.
El experto señaló que, con la colaboración de Eduardo Pastor y Carolina Cruz ambos ingenieros agrónomos se han plantado alrededor de 120 hectáreas totales hasta el año pasado entre el Valle de Copiapó, Ovalle, Combarbalá, Paine y Rancagua y esperan que todas las renovaciones puedan ser en este sistema o similares a éste, para que el productor pueda disminuir sus costos de producción.