Acusan desajuste en la estructura económica de Chile en desmedro del agro
Dirigentes proponen medidas al Gobierno ante el tipo de cambio
Una invitación a pensar en el país. Ése es el llamado que hacieron más de 50 organizaciones, entre ellas gremios, trabajadores y empresarios de los sectores exportador, agrícola, transporte, turismo y la industria sustituidora de importaciones de Chile a través del documento “Una invitación a pensar Chile: Competitividad y Crecimiento Armónico del País”.
Dicho documento nació ante la preocupación de los diversos sectores por los efectos en el desarrollo del país, de la actual situación económica respecto al tipo de cambio.

Antonio Walker, presidente de Fedefruta; Lincoyan Araya, de la Asociación Gremial de Transporte Internacional; y Ronald Bown, presidente de Asoex.
“Tal como se demuestra en el documento, los vaivenes económicos internacionales, en conjunto con políticas públicas aplicadas en los últimos años, en lo referido al gasto público y al uso de tipo de cambio como herramienta antiinflacionaria, han provocado un serio desajuste en la estructura económica nacional, en que se visualizan claras discriminaciones entre regiones y agentes económicos”, comentó Ronald Bown, presidente de la Asociación de Exportadores de Chile (ASOEX) en la presentación del documento.
Bown indicó que la economía no puede basarse sólo en el cobre. Señaló que se está viendo una diferenciación muy seria entre la inversión y desarrollo de las zonas mineras en comparación a aquellas que no lo son. “Hay un desfase de crecimiento”, comento, el cual para solucionarlo, requiere de un tipo de cambio distinto al de hoy.
Agregó que el objetivo final del documento – el cual será enviado al gobierno - es reclamar políticas claras y precisas, para que se pueda actuar consecuentemente, aminorando los efectos negativos y contribuir al desarrollo económico del país.
Por su parte Antonio Walker, presidente de Fedefruta, recalcó la vocación exportadora del país, el cual no se puede pensar como un monoexportador. “Chile es un país que tiene una agricultura con vocación exportadora, una que ha sido capaz de generar más de 800 mil empleos” indicó Walker.
Agregó que la fruticultura de exportación genera 450 mil empleos y el sector agropecuario aporta US$13 mil millones al país.
“Nosotros no podemos abandonar nuestra vocación exportadora, para lo cual pedimos firmemente a las autoridades políticas y económicas de este país terminar con la indiferencia al sector productivo. Somos un país exportador que genera mucho empleo y por eso estamos donde estamos”.
“Hoy hay una invitación a repensar Chile, porque estamos muy dependientes del Cobre. Estamos pasando a ser un país mono exportador y eso es muy grave. A este país lo hizo crecer especialmente el sector agropecuario de exportación”.
“Para exportar necesitamos de herramientas, necesitamos un tipo de cambio estable y competitivo” comentó el representante de Fedefruta, en un sector de la agricultura donde los costos de producción han aumentado.
En la ocasión, Ferenc Massow, Presidente de la Federación de Agricultores de la Provincia de Linares, hizo un fuerte llamado al gobierno de Sebastián Piñera a cumplir las promesas hechas al sector en relación al tipo de cambio y al boletín comercial. “Hoy el país tiene los recursos económicos para sacar la agricultura general de hoyo en que se encuentra”, puntualizó.
“Nuestro llamado es que el gobierno cumpla, pues de lo contrario nos obligará a exigir lo prometido” enfatizó.
Por su parte Segundo Stelein, representando a los trabajadores, dijo que el gobierno ha actuado con lentitud y que no se han hecho las políticas correctas respecto al tipo de cambio. Señaló que el llamado de los trabajadores del sector es que si hay que movilizarse para hacer entender a la autoridad que Chile es más que el Cobre “hay que hacerlo”.
Recomendaciones
En el documento se entregan una serie de propuestas. Entre ellas:
La creación de un Fondo de Estabilización Competitiva por unos 30.000 millones, financiado con una Ley de Endeudamiento Contingente destinada a elevar el ahorro en el exterior por encima del 40%.
Una agenda de competitividad permanente.
Un Programa Nacional de Reconversión de especies o variedades, similar al del sector forestal.
Un plan de apoyo a la competitividad de la pequeña y mediana agricultura.
Creación de un Programa de Empleo con Apoyo Fiscal (PEAF)