El penúltimo fin de semana de enero ha traído a la Comunitat, junto con el frío, tristeza y devastación en los cultivos. Las cosechas de hortalizas de invierno se han visto arrasadas por unas temperaturas extremadamente frías que se han mantenido durante muchas horas en las últimas noches.

Las alcachofas, las habas, las patatas, las coliflores y los cultivos de hoja como las lechugas, espinacas o acelgas, han sido las verduras más perjudicadas por estas heladas, que se suman a las que la Comunitat ya sufrió a principios del pasado mes de diciembre.

Así lo aseguraron ayer fuentes del sindicato agrario La Unió, quienes explicaron que habrá que ver si el corazón de la alcachofa no está dañado para comprobar si al menos sirve para la industria de la conserva.

Ante los graves daños ocasionados por el frío, la organización reclamó ayer la puesta en marcha urgente de una comisión de seguimiento para analizar los daños causados por las bajas temperaturas. Asimismo, solicitará ayudas en la misma línea de las aprobadas por las fuertes heladas del año 2005, entre ellas apoyos directos por la pérdida de producción así como préstamos con intereses bonificados.

Otro cultivo con incidencia es el níspero de la zona de Callosa d’En Sarrià, con un porcentaje de daños que va del 30 al 40 por ciento y unas pérdidas estimadas ya de inicio en 1,5 millones de euros porque el hielo reduce su tamaño y lo raja.

Más gasto en calor
El frío de los últimos días ha hecho que los ganaderos  hayan aumentado su gasto en gasóleo y gas para la calefacción de las granjas, así como el coste en piensos debido a los pastos helados.

Los únicos que se han salvado esta vez han sido los cultivos de secano, para los que las bajas temperaturas no representan problemas pues la aceituna está prácticamente recolectada, el almendro no ha florecido aún en la mayor parte de las zonas, y las viñas están en parada invernal y necesitan una cantidad suficiente de horas de frío para un correcto desarrollo.

Pero sin duda, los grandes perjudicados por las temperaturas extremas son los cítricos. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) estimó ayer que cerca del 20 por ciento de los cultivos han sido arrasados por el frío. Hay que tener en cuenta que las heladas del pasado mes de diciembre ya acabaron con el 30 por ciento de las cosechas, con unas pérdidas de 142 millones de euros.

El presidente de AVA, Cristóbal Aguado, indicó ayer que las Administraciones tienen que extremar los controles para evitar que puedan llegar a los mercados de fruta u hortalizas que no reúnan los requisitos comerciales exigibles.

Además, explicó que no descarta pedir una reunión con las Administraciones para estudiar la posibilidad de poner en marcha ayudas extraordinarias.

Por el momento, se prevé que las bajas temperaturas se mantengan al menos durante unos días.

Fuente: La Razon