Tras el terremoto, el dueño de Champiñones Abrantes debió cerrar la compañía. Ahora, el negocio será reflotado mediante una nueva sociedad con el empresario.

Un nuevo negocio sumó Juan Sutil a su portafolio de proyectos agrícolas. A Coagra y Viña Sutil, entre otros negocios, incluyó ahora el rubro de los champiñones. La iniciativa la está impulsando de la mano de quien fuera el mayor productor de hongos del país, con más del 70% del mercado local, Champiñones Abrantes.

A raíz del terremoto del 27 de febrero, las instalaciones y producción de la compañía, ubicadas en Paine, quedaron absolutamente destruidas. Abrantes facturaba unos US$ 80 millones anuales. Ante eso, su dueño, Juan Paulo Sánchez, decidió cerrar la industria y acogerse al artículo 159, número 6, del Código del Trabajo, que permite despedir trabajadores por razones de fuerza mayor. Unas 200 personas fueron desvinculadas de la empresa, a las que se les pagó la mitad de su indemnización.

"Tras ese suceso me encontré con Sánchez, a quien conocía, y le dije que me interesaba el negocio y que viéramos la opción de reflotarlo, ya que no era posible que se perdiera un proyecto de 30 años", relata Sutil.

Así, junto a su socio José Larraín Cruz -y su familia- y al director de Coagra, Antonio Quesney, decidieron asociarse con Sánchez. "Creamos una nueva empresa que será impulsada por Empresas Sutil y donde Juan Paulo tendrá una participación minoritaria", revela el empresario.

La nueva sociedad se llamara Champiñones Abrantes S.A., ya que la marca fue comprada por los nuevos socios, junto a la maquinaria que logró sobrevivir al terremoto. La inversión total del nuevo emprendimiento asciende a US$ 12 millones.

Entre los gastos relevantes que habrá que hacer está encontrar una nueva locación para instalar la fábrica, ya que el terreno anterior quedó inutilizable. "Se hundió y estamos buscando uno cerca", destaca Sutil. Además, están trayendo tecnología de última generación, con el objetivo de tener la nueva compañía operativa de aquí a seis meses. "Queremos empezar pronto a recuperar la participación que tenía Abrantes", comenta.

El personal que tendrá la empresa es otro de los focos de los nuevos socios. Sutil dice que la idea es contratar, principalmente, a quienes perdieron su trabajo en la compañía. "Esta es una de las razones por las que no queremos irnos del sector", relata.

La historia de Abrantes

Champiñones Abrantes era una empresa familiar creada en 1983, cuyas instalaciones estaban ubicadas en la comuna de Paine, en las cercanías de la laguna de Aculeo.

Su producción consistía en el cultivo de champiñones Blancos y Portobello para el mercado en fresco, mediante la utilización de tecnología punta, según está plasmado en su página web.

La compañía distribuía a los principales canales mayoristas y minoristas del país

Fuente: La Tercera

3.junio.2010 - Portal Fruticola