El aguacate mexicano tiene un gran futuro

La industria del aguacate en México posee una producción cercana a las tres millones de toneladas anuales y más de dos millones destinadas a exportación, lideradas principalmente por el mercado estadounidense, que absorbe cerca del 80% de los envíos. 

Para conocer la situación actual, los desafíos y la proyección, Portalfruticola.com conversó con Jesús Michel Espinoza, director de la Asociación de Productores y Exportadores de Aguacate de Jalisco (APEAJAL), quien indicó que el sector enfrenta desafíos crecientes derivados del cambio climático, la escasez de agua, la presión de nuevas plagas y la competencia internacional de países como Perú, Colombia, Chile y Kenia, que han modernizado rápidamente sus sistemas productivos y logísticos.

¿Cuál es el balance actual de la industria del aguacate en México en términos de producción, exportación y consumo interno?

Actualmente, en México se producen cerca de tres millones de toneladas de aguacate, distribuidas en 30 estados del país. La mayor parte de la producción se concentra en Michoacán, Jalisco, Estado de México y Nayarit.

Del total producido, alrededor de dos millones de toneladas se destinan a la exportación. El 80% de estas exportaciones tiene como destino principal a Estados Unidos, seguido por Japón, Canadá,  Europa y Oriente Medio.

En términos productivos, ¿cuáles han sido los principales desafíos del sector?

El principal desafío es el cambio climático, el cual afecta directamente el comportamiento fisiológico del árbol. Esto ha modificado los periodos de floración, así como el desarrollo final del fruto, generando variaciones en la productividad.

Asimismo, la disponibilidad de agua se ha visto comprometida. En Jalisco, alrededor del 85% de la superficie cuenta con sistemas de riego. 

Finalmente, las variaciones en el clima han alterado el comportamiento de las principales plagas y enfermedades del cultivo. 

¿Cuáles son los principales retos que enfrenta hoy el sector del aguacate mexicano frente a la competencia internacional?

Países como Perú, Chile, Colombia, Kenia y República Dominicana han incrementado su superficie sembrada, tecnificado su producción y fortalecido sus capacidades de exportación, lo que ha  generado nuevos escenarios para México. 

La oferta global de aguacate ha aumentado significativamente. Perú y Colombia, por ejemplo, han logrado posicionarse con mayor fuerza en Europa y Asia, lo que presiona los precios y reduce la  participación mexicana en algunos mercados. Algunos competidores cuentan con costos logísticos más bajos hacia ciertos destinos y rutas más eficientes hacia Europa, como ocurre con Perú.

El costo de producción en México, especialmente en estados líderes como Michoacán y Jalisco, es más alto que en países emergentes donde la mano de obra es más barata o los costos de tierra son  menores. Esto reduce el margen de competitividad.

Los mercados internacionales demandan cada vez más: certificaciones ambientales y sociales, trazabilidad completa del producto, manejo responsable del agua y del suelo. Algunos países competidores han avanzado rápidamente en adoptar estas prácticas como parte de su estrategia comercial.

Mientras algunos países han incrementado sus rendimientos mediante altos niveles de tecnificación, México enfrenta el reto de modernizar parte de sus huertas, especialmente las de temporal, para mantener niveles de productividad competitivos.

Aunque México es líder en exportación, depende en gran medida del mercado estadounidense, lo que implica vulnerabilidad ante cambios regulatorios, comerciales o de consumo. Otros países han  avanzado en expandirse hacia Europa, Medio Oriente y Asia con mayor agresividad.

Hasta la fecha, ¿cuál es el balance que hacen del mercado de Estados Unidos?

Hasta la semana 47, el mercado de Estados Unidos ha mostrado un comportamiento estable y con  una demanda sólida. A la fecha, se han enviado 451,885 toneladas, cifra que refleja un avance significativo respecto a la  proyección anual.

Este volumen confirma que Estados Unidos continúa siendo el principal destino del aguacate mexicano, absorbiendo la mayor parte de los envíos provenientes principalmente de Michoacán y  Jalisco. Aunque la oferta internacional ha crecido (Perú, Colombia, Chile), el mercado estadounidense mantiene una preferencia clara por el producto mexicano, tanto por disponibilidad como por calidad.

Un punto relevante es que Jalisco ha alcanzado una participación del 23% en las exportaciones hacia Estados Unidos, lo que ha permitido posicionar su fruta en el mercado vecino, especialmente  durante el inicio de la temporada (julio–septiembre). Esta aportación ha sido clave para garantizar la continuidad del abastecimiento y fortalecer la presencia de México en el mercado.

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¿Cómo se encuentra la diversificación de mercados?

La diversificación de mercados es una prioridad estratégica para la industria del aguacate de Jalisco. 

Actualmente exportamos a más de 30 países, entre ellos Estados Unidos, Canadá, Japón, España,  Francia, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Hong Kong y Reino Unido, por mencionar algunos.

Durante este año logramos un avance significativo con la apertura del mercado brasileño, un  destino con gran potencial de crecimiento en Sudamérica. Asimismo, la Asociación continúa trabajando de forma coordinada en la gestión para abrir nuevos mercados como Chile, Corea del Sur y China, los cuales representan oportunidades estratégicas para ampliar nuestra presencia global y fortalecer la competitividad del aguacate jalisciense.

¿Qué avances tecnológicos están adoptando los productores para mejorar la eficiencia y  calidad del aguacate mexicano?

Están incorporando nuevas tecnologías orientadas a la  agricultura de precisión para mejorar tanto la eficiencia productiva como la calidad del fruto. En  los últimos años se han instalado estaciones meteorológicas dentro de los huertos, las cuales  registran variables como temperatura, lluvia, humedad relativa, radiación solar y velocidad del  viento en tiempo real. Esta información permite ajustar de manera más precisa la programación del  riego, anticipar riesgos climáticos y optimizar la aplicación de insumos. 

Paralelamente, el uso de sensores en suelo y planta ha cobrado relevancia, pues permiten monitorear de forma continua la  humedad a diferentes profundidades, así como indicadores del crecimiento y el estado fisiológico del árbol. 

A estas herramientas se suma el uso de drones equipados con cámaras multiespectrales para generar  mapas NDVI e identificar zonas con menor vigor, posibles deficiencias nutrimentales, problemas  de plagas o estrés hídrico antes de que sean visibles en campo. 

Además, muchos productores han migrado hacia sistemas de riego por goteo, que permiten un uso  considerablemente más eficiente del agua y facilitan el fertirriego, llevando los nutrientes  directamente a la zona radicular en dosis precisas.

¿Qué estrategias tienen para posicionar el aguacate mexicano como un producto premium en  los mercados?

Estamos impulsando una estrategia basada en calidad, tecnología y certificaciones. La adopción de herramientas como estaciones meteorológicas, sensores, drones y riego por goteo nos permite mejorar la eficiencia en campo y garantizar fruta más uniforme y con mejores características para los mercados de alto valor. 

Al mismo tiempo, estamos fortaleciendo la certificación de los productores en estándares como SRRC, GlobalG.A.P., SMETA y los requisitos de USDA, ya que estas acreditaciones abren nuevas oportunidades comerciales y colocan nuestro producto en las mejores ventanas del mercado internacional. La nueva mesa directiva ha asumido como objetivo apoyar a los productores en este proceso.

Aunque todavía no contamos con proyectos definidos de digitalización o inteligencia artificial, existe total apertura para adoptarlos en el futuro y así reforzar la trazabilidad y competitividad del sector. En conjunto, estas acciones buscan consolidar al aguacate mexicano como un producto confiable, de alta calidad y con proyección global.

¿Cómo visualiza el futuro del sector aguacatero mexicano en los próximos cinco a diez años?

Veo al sector aguacatero mexicano como una industria llena de retos y oportunidades, en la que trabajamos todos los días para mantenernos como líderes mundiales en  producción y exportación de aguacate, pero ahora con un enfoque mucho más fuerte en  sostenibilidad, tecnología y diversificación de mercados.

¿Qué papel jugará la sostenibilidad en la competitividad internacional del aguacate mexicano?

La sostenibilidad se ha convertido en un elemento central para la competitividad internacional del aguacate mexicano. En los principales mercados de destino —principalmente Estados Unidos, la Unión Europea y Asia se han endurecido los requisitos ambientales y sociales que deben cumplir los productos agrícolas.

En este contexto, factores como la eficiencia en el uso del agua, la reducción de emisiones, la trazabilidad, la protección de la biodiversidad y el respeto a las condiciones laborales se han vuelto determinantes para garantizar el acceso a dichos mercados. De no atender estas demandas, los exportadores mexicanos podrían enfrentar barreras no arancelarias, restricciones comerciales y una disminución de su presencia global.

Finalmente, ¿qué mensaje le gustaría enviar?

Hoy ya no basta con producir aguacates; el futuro nos exige producir mejor, con menos y de manera más inteligente. Para mantenernos competitivos y asegurar la permanencia de nuestro sector, debemos comprometernos con un uso eficiente de los recursos, fortalecer los principales esquemas de inocuidad y asumir plenamente nuestra responsabilidad social.

Nuestro camino debe basarse en cinco ejes fundamentales: fitosanidad, inocuidad, sustentabilidad, productividad, responsabilidad social y trazabilidad. Estos pilares no solo elevan la calidad de lo que hacemos, sino que garantizan que cada aguacate que llega al mercado represente un compromiso real con la salud, el medio ambiente y el bienestar de nuestras comunidades.

Asimismo, es indispensable apostar por la innovación constante, incorporando tecnologías, prácticas sustentables y sistemas que nos permitan mejorar cada día. Ningún reto puede superarse de manera aislada: solo trabajando en conjunto, productores, empacadores, exportadores y todos los actores de la cadena, podremos fortalecer a la industria y enfrentar con éxito los desafíos actuales.

El mensaje es claro: si queremos seguir siendo líderes en el mundo, debemos evolucionar, innovar y colaborar. El aguacate mexicano tiene un gran futuro, y está en nuestras manos construirlo de manera responsable y sostenible.