Coquimbo: Caudales y embalses en niveles críticos
El último Boletín Agrometeorológico del INIA para Coquimbo, región que anota un déficit de precipitaciones entre un 47% y un 54%, no es alentador para sus principales especies frutales y cultivos.
En el documento se indica que los embalses de la región continúan con niveles críticos de reserva. Mientras que los más grandes como la Paloma, Puclaro y Recoleta presentan volúmenes inferiores al 8% de su capacidad, el de Cogotí registra niveles de agotamiento. La situación solo es mejor en embalses más pequeños como los de La Laguna y Corrales, que muestran un 57% y 43% de su capacidad, respectivamente.
Con respecto a los caudales durante diciembre fueron 2.1, 0.6 y 2.2 m3/seg en los ríos Elqui, Grande y Choapa, respectivamente, agrega el INIA.
"Estos valores representan caudales inferiores al promedio histórico, permaneciendo en valores deficitarios que equivalen solo al 11.3%, 6.8% y 9.6%".
Todos estos datos pueden encontrarse en el boletín publicado en el sitio web del INIA
OBSERVACIONES DEL BOLETÍN:
Situación de frutales
En el manejo del riego es recomendable reforzar los esfuerzos para entregar los aportes hídricos necesarios durante la fase de madurez. En suelos con baja capacidad de retención de humedad (arenosos) es aconsejable acortar los tiempos de riego, pero aumentar la frecuencia.
Se reitera la necesidad de evaluar la real disponibilidad hídrica y dimensionar el área productiva en función de esta disponibilidad. Tal vez haya que dejar de regar sectores en beneficio de sectores con buena capacidad productiva y que permitan obtener rendimientos económicos adecuados, dando la prioridad a cultivos más rentables y dejando sin riego otros cultivos con menor rentabilidad económica.
Situación de hortalizas
Esta época es muy adecuada para el desarrollo de una amplia gama de hortalizas. El problema radica en la baja disponibilidad de agua de la presente temporada. Así mismo es una época con gran incidencia de plagas de todo tipo.
En la actualidad, los agricultores han tenido que disminuir la superficie cultivada debido a la escasez de agua de riego. Se recomienda por tanto, realizar cultivos de ciclo corto (2 a 3 meses) y evitar sembrar o plantar en verano a menos que se tenga asegurada la disponibilidad de agua a través de un pozo o un estanque de acumulación que permita administrar los turnos de riego que rigen los canales.
El uso de mulch también es muy recomendable en hortalizas ya que permite conservar la humedad en el suelo por más tiempo, disminuyendo el componente de evaporación directa de agua de riego, además de evitar la competencia por agua con las malezas.
Fuente: INIA