Phytophthora es un género de oomicetos patógenos que causan enfermedades en una amplia variedad de plantas. El nombre Phytophthora se deriva del griego y literalmente significa “destructor de plantas”. Aunque a menudo se les llama "hongos", los oomicetos en realidad pertenecen a un grupo separado y tienen diferencias biológicas significativas en comparación con los verdaderos hongos.
Muchas especies de Phytophthora causan enfermedades en las plantas, como la marchitez, la podredumbre de la raíz, la podredumbre del cuello y el chancro.
Una de las especies más conocidas es Phytophthora infestans, que fue responsable de la hambruna de la patata en Irlanda en la década de 1840. Otra especie, Phytophthora ramorum, es el agente causante del síndrome de declinación del roble, que ha afectado a los bosques de robles en la costa oeste de EE.UU.
Las Phytophthoras pueden reproducirse sexual y asexualmente. Las estructuras asexuales se llaman esporangios, y pueden liberar zoósporas móviles que nadan hacia el tejido de la planta para infectarla. En ciertas condiciones, las zoósporas pueden encistarse y germinar directamente. En la reproducción sexual, se forman oosporas que son estructuras de resistencia y pueden sobrevivir en el suelo durante períodos prolongados.
El control de las enfermedades causadas por Phytophthora puede ser desafiante debido a la capacidad de estas patologías de persistir en el suelo durante años. Las estrategias incluyen el uso de cultivares resistentes, prácticas de manejo cultural, como la mejora del drenaje y la rotación de cultivos, y la aplicación de fungicidas específicos.
Importancia económica: Las enfermedades causadas por Phytophthora pueden tener un gran impacto económico, ya que pueden afectar a cultivos agrícolas importantes y a plantas ornamentales.
La identificación y manejo adecuado de las enfermedades causadas por Phytophthora es crucial para la agricultura y la silvicultura. Con la globalización y el movimiento de plantas y productos vegetales alrededor del mundo, es esencial tomar medidas para prevenir la propagación de estos patógenos a áreas no infestadas.
Controlar y prevenir la infección por Phytophthora en tomates es esencial para asegurar una producción saludable y rentable. A continuación, se presentan algunas estrategias para controlar y prevenir la enfermedad:
Selección de variedades resistentes: Es esencial elegir variedades de tomate que sean resistentes a Phytophthora, si están disponibles en su área. Estas variedades han sido desarrolladas para tener resistencia genética al patógeno.
Rotación de cultivos: La rotación con cultivos no susceptibles a Phytophthora, como los cereales, puede ayudar a reducir la cantidad del patógeno en el suelo.
- Drenaje: Un buen drenaje es fundamental. Phytophthora prospera en suelos mal drenados y encharcados.
- Riego: Evite el riego por inundación o aspersión que moje las hojas. En su lugar, opte por el riego por goteo o por surcos.
- Ubicación del campo: Evite plantar en áreas propensas a la acumulación de agua.
- Solarización: Esta técnica implica cubrir el suelo con plástico transparente durante el verano para elevar su temperatura y matar patógenos, incluida Phytophthora.
- Biofumigación: Usar cultivos como mostaza o rábano picante, que cuando se incorporan al suelo liberan compuestos que son tóxicos para algunos patógenos del suelo.
Hay fungicidas específicos que son efectivos contra Phytophthora. Asegúrese de seguir las recomendaciones de etiquetado y aplicarlos de manera preventiva o al primer signo de enfermedad.
Herramientas y equipos: Limpie y desinfecte regularmente las herramientas y equipos que entran en contacto con el suelo o las plantas.
Plantas enfermas: Retire y destruya las plantas infectadas de inmediato para evitar la propagación de la enfermedad.
Asegúrese de obtener plantines de fuentes confiables y reputadas. Inspeccione los plantines en busca de signos de enfermedad antes de plantar.
Use camas elevadas o montículos para plantar, lo que puede ayudar a prevenir la acumulación de agua alrededor de las raíces.
Inspeccione las plantas regularmente en busca de síntomas de la enfermedad, como amarillamiento, marchitez o lesiones en las raíces o en el cuello de la planta.
Mantenga un espacio adecuado entre las plantas para asegurar una buena circulación del aire, lo que puede reducir la humedad y minimizar las condiciones favorables para la enfermedad.
El control efectivo de Phytophthora en tomates generalmente requiere una combinación de estas prácticas. Al implementar un enfoque integrado, es posible minimizar el impacto de esta enfermedad en la producción de tomates.
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