Los cultivos tolerantes a la salinidad y su grado de tolerancia, pueden variar según el tipo de sal presente y las concentraciones de estas sales. Los cultivos tienen distintos niveles de tolerancia a la salinidad, y su capacidad para prosperar se suele medir en términos de la concentración de sal en el agua de riego, expresada en decisiemens por metro (dS/m) o en milimoles de carga de sodio por litro (mM Na+/L).
Cebada (Hordeum vulgare): Tolerante. Umbral de salinidad: 8-10 dS/m.
Espárrago (Asparagus officinalis): Moderadamente tolerante. Umbral de salinidad: 5-7 dS/m.
Dátil (Phoenix dactylifera): Muy tolerante. Puede soportar hasta 11-13 dS/m o más.
Remolacha azucarera (Beta vulgaris): Tolerante. Umbral de salinidad: 7-8 dS/m.
Alfalfa (Medicago sativa): Moderadamente tolerante. Umbral de salinidad: 2-5 dS/m.
Pasto Bermuda (Cynodon dactylon): Muy tolerante. Puede soportar hasta 19-20 dS/m.
Sorgo (Sorghum bicolor): Tolerante. Umbral de salinidad: 6-8 dS/m.
Tomate (Solanum lycopersicum): Moderadamente sensible. Umbral de salinidad: 2-3 dS/m.
Algodón (Gossypium spp.): Tolerante. Umbral de salinidad: 7-10 dS/m.
Avena (Avena sativa): Moderadamente tolerante. Umbral de salinidad: 5-6 dS/m.
Estos valores son aproximados y pueden variar según las condiciones específicas y las variedades de cada cultivo. También es importante mencionar que el estrés salino no sólo se relaciona con la concentración de sal, sino también con el tipo de sal (por ejemplo, cloruro de sodio, sulfato de sodio) y otros factores del suelo y el ambiente.
Además, el manejo agronómico adecuado puede ayudar a las plantas a soportar niveles más altos de salinidad.
La acidez del suelo es un factor limitante para la producción agrícola en muchas partes del mundo. La acidez se mide en términos de pH, siendo el pH 7 neutro. Un pH por debajo de 7 indica acidez, mientras que un pH por encima de 7 indica alcalinidad.
La mayoría de los cultivos prefieren un pH entre 6 y 7.5, pero algunos cultivos son especialmente tolerantes a suelos ácidos y pueden crecer en condiciones con un pH mucho más bajo.
Papa (Solanum tuberosum): Tolerante a suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 5.0-6.5.
Arándano (Vaccinium spp.): Es especialmente conocido por su preferencia por suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 4.0-5.5.
Camelia (Camellia sinensis) - planta del té: Prefiere suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 4.5-6.0.
Azalea (Rhododendron spp.): Prefiere suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 4.5-6.0.
Caña de azúcar (Saccharum officinarum): Tolerante a la acidez. Rango de pH óptimo: 5.5-6.5.
Soja (Glycine max): Puede tolerar suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 5.5-7.0.
Maní o cacahuate (Arachis hypogaea): Tolerante a suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 5.8-7.0.
Centeno (Secale cereale): Tolerante a suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 5.5-7.0.
Melilotus spp. (meliloto): Tolerante a suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 5.5-7.0.
Trebol (Trifolium spp.): Puede crecer en suelos ácidos. Rango de pH óptimo: 5.5-7.0.
Es importante señalar que, aunque estos cultivos pueden tolerar suelos ácidos, a menudo se benefician de prácticas de manejo que reducen la acidez, como la aplicación de cal agrícola. Además, otros factores del suelo, como la presencia de aluminio tóxico en suelos muy ácidos, pueden afectar el crecimiento de las plantas independientemente del pH.
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