Escasez de mano de obra agrícola en EE.UU. presiona legalización de los campesinos
El informe “Inmigración y Agricultura” realizado por la organización New American Economy resalta que los agricultores están luchando por encontrar suficientes trabajadores estadounidenses para realizar labores en el campo que requieren esfuerzos físicos.
A esto se suma que las visas H-2A para trabajadores temporales son insuficientes para satisfacer la demanda.
En 2020, las granjas de Estados Unidos solicitaron 314.028 trabajadores H-2A y solo 275.430 fueron aprobados (satisfaciendo el 87,7 % de las necesidades laborales).
De acuerdo con Efe, los principales estados que solicitaron trabajadores H-2A fueron Florida (39.000), Georgia (27.600), Washington (26.800), California (25.400) y Carolina del Norte (22.000).
Esta escasez de trabajadores en las granjas estadounidenses ha llevado a una mayor dependencia de las importaciones de alimentos, destaca el informe. En los últimos 20 años, la proporción de frutas frescas importadas se ha duplicado, del 20,1 % en 2000 al 42,7 % en 2019, con aumentos aún mayores para frutas como frambuesas (34,9 % a 70,3 %) y aguacates (del 25 % a más del 90 %).
Esta dependencia de frutas y verduras importadas está impactando la economía, advierte el análisis. En 2019, los estadounidenses gastaron un total de USD 68.600 millones en frutas y verduras, y la gran mayoría (USD 48.500 millones) se gastó en productos importados.
Los datos se dan en medio de los esfuerzos para sacar adelante una legalización de los trabajadores agrícolas indocumentados.
Los demócratas Dick Durbin y Álex Padilla copresidieron una audiencia convocada en el Senado para discutir mecanismos que conduzcan a la legalización de millones de trabajadores agrícolas que, en promedio, han estado por 18 años en el país.
Durbin destacó que “la cadena de suministro de alimentos depende, en gran medida, de los inmigrantes”.
Añadió que esta comunidad realiza trabajos peligrosos, siempre bajo la amenaza de la deportación.
“Su trabajo es agotador y peligroso, en el campo y en las plantas de procesamiento de alimentos. Más de medio millón de trabajadores rurales contrajeron la covid-19″, señaló.
En estados como California, los inmigrantes constituyen más del 80 % de la fuerza laboral agrícola.
Otros estados como Washington (72,6 %), Florida (65,4 %) y Oregón (60,7 %) también tienen porcentajes de inmigrantes más altos que el promedio en su fuerza laboral agrícola, destaca el estudio.
En marzo pasado la Cámara de Representantes aprobó la Ley de Modernización de la Fuerza Laboral Agrícola, que brindaría la ciudadanía a millones de trabajadores agrícolas, pero el Senado aún no discute una posible aprobación de la medida.