Una de las regiones más afectadas en Chile con la sequía y, por ende, con problemas de escasez de agua en sus predios agrícolas, es la de Valparaíso.

Es por esto por lo que la Fundación para la Innovación Agraria del Ministerio de Agricultura de Chile (FIA); junto con el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) están impulsando un programa de innovación en el uso eficiente del recurso hídrico para la agricultura familiar campesina. Esto en las comunas de San Felipe, Petorca, Valparaíso, Quillota y San Antonio.

El proyecto tiene por objetivo no solo enfocarse en inversiones para tecnificar los riegos; sino que también incorporar un proceso de aprendizaje en los productores y otros actores.

Lo anterior con la idea de optimizar la implementación de soluciones tecnológicas que permitan hacer más eficiente el uso del agua.

Proyecto

Ejecutado por el INIA, el proyecto tiene una duración de 24 meses. La idea es fomentar la implementación de soluciones tecnológicas a nivel intrapredial.

El objetivo es lograr un uso eficiente del recurso hídrico y la incorporación de avances tecnológicos de riego orientados a la eficiencia energética, con el fin de mejorar la competitividad de sus unidades productivas

De acuerdo con la información entregada por el INIA y FIA, las personas beneficiadas en cada subterritorio corresponden a 150 productores y 180 estudiantes y/o profesores.

Estos productores podrán aumentar su rentabilidad económica y social, ya que serán capacitadas en diversas técnicas, tales como instalación, operación, manejo y mantención de sistemas de riego tecnificado.

Al respecto, el director del proyecto e ingeniero agrónomo del INIA, Dr. Carlos Zúñiga, dijo a PortalFrutícola.com que un primer paso del proyecto es hacer un diagnóstico y, dependiendo de las necesidades de los productores, se escogerán las tecnologías a impleentar en las parcelas demostrativas.

En cuanto a los beneficiarios comentó que “les vamos a enseñar cómo utilizar las distintas tecnologías que vamos a implementar; y eso se hace a través de cuatro talleres orientados a los productores y estudiantes”.

Zúñiga agregó que estos talleres a futuro deberán ser útiles para que los productores puedan seguir desarrollando conocimiento e irlas mejorando. “Que se sientan más abiertos a seguir investigando y seguir desarrollando este tipo de tecnologías”, comentó.

Asimismo, la importancia de este proyecto, para Zúñiga, recae en que también la producción será más eficiente.

“A lo que apuntamos nosotros es a un uso eficiente del agua. Producir más o igual, pero con una mejor calidad y ocupando la misma o menor cantidad de agua que se ocupa en el momento”, dijo Zúñiga.

 Agregó que todos se verán beneficiados. “No solamente la agroindustria, sino que también los mismos productores, porque sus costos disminuirían; sus ingresos se elevarían ; y el consumo de agua también podría verse disminuido”, concluyó.