En ambos países se descubrieron que se intentaba trasladar la droga al interior de embarques de piñas, las cuales fueron incautadas por la policía de dichas naciones.

En Estados Unidos, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) interceptó un cargamento de piñas provenientes de Costa Rica que trasladaba 45 kilos de cocaína en su interior.

Según consignó el medio Crhoy.com, la policía fronteriza estadounidense detectó que la droga estaba oculta en el fondo de 20 cajas de cartón donde se trasladaba la fruta.

Este decomiso fue se realizó gracias a un análisis portuario por la unidad canina de la policía al cargamento que tenía como destino la localidad de Clifton en Nueva Jersey.

Por otra parte, en España se interceptó otro embarque de piñas, en el cual se intentaba trasladar 67 kilos de cocaína.

La fruta fue enviada desde Costa Rica, mientras que la detección se realizó en Mercamadrid, un mercado hortofrutícola de la capital española.

De acuerdo a lo publicado por New York Post, la policía española informó que cada piña fue “perfectamente ahuecada y rellenada con cilindros compactos” que contenían la cocaína y fueron cubiertos con cera o parafina amarilla para ocultar los "olores de los productos químicos que contiene droga y evitar su detección".

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