Araña del trigo, peligro en el campo. Cómo reconocer y cuidarse de la "viuda negra"

Agrotecnia Destacados Más Noticias
Araña del trigo, peligro en el campo. Cómo reconocer y cuidarse de la

El contenido de este artículo fue publicado por www.inia.cl y www.saludactual.cl , y revisado y reeditado por Portalfruticola.com

La Araña del Trigo, viuda negra o "poto colorado", peligro en el campo (Latrodectus sp.)

Araña de importancia en Chile dada la potencia de su veneno e incidencia en su mordedura. De hábitos silvestres, diurnos y más comunes en verano. Su color es negro con mancha roja en extremo postero-dorsal. Factible de encontrar en campos de trigo, alfalfa, zonas áridas.

El 70% de los accidentes se relacionan a faenas agrícolas y afectan a hombres jóvenes. El dolor se presenta con gran intensidad en la zona de la mordida, contracturas musculares, temblores intermitentes, rigidez muscular abdominal y contractura de extremidades.

CICLO DE VIDA DE LA ARAÑA VIUDA NEGRA

El apareamiento de la viuda negra ocurre en primavera. En casos raros, la hembra de la viuda negra consume al macho después del apareamiento, con el fin de conseguir nutrientes para la fertilización de los huevos.

La hembra de la araña viuda negra puede producir varios sacos de huevos en los meses de verano. Esos sacos son cuidadosamente tejidos y protegidos ferozmente por la hembra hasta que la cría eclosiona.

Los sacos de huevos son de color habano, blanco o gris y tienen una textura de papel. Ellos pueden tener la forma de una pera o ser globulares. Cada saco de huevos contiene cientos de huevos, de los cuales emergen cientos de pequeñas arañas. Sin embargo, pocas de esas jóvenes arañas sobreviven dado que en su primera etapa de vida las arañas viuda negra presentan comportamientos caníbales.

Las pequeñas arañas sobrevivientes pasan por los estados de muda, conocidos como instar. En comparación con la hembra, los machos generalmente requieren menos cambios para alcanzar la madurez. Muchas de las arañas jóvenes pasan el invierno en un estado inmaduro y alcanzan la máxima madurez en la primavera.

El término de vida de las arañas viudas negras generalmente es de un año, sin embargo, se ha documentado que algunos especímenes viven hasta tres años.

Ciclo de vida de las arañas

Los primeros reportes de mordeduras por estas arañas fueron hechos en los estados del sur de los Estados Unidos de Norteamérica en el año 1889. Hoy en día es la principal causa de aracnoidismo grave en ese país.

Las arañas de esta especie tienen una distribución mundial, el género está formado por cinco especies de distinta ubicación geográfica. En Chile la única especie encontrada es Latrodectus mactans, la que es encontrada en todas las regiones del país.

La hembra adulta es de color negro intenso, aterciopelado, con una longitud de su cuerpo (cefalotórax más abdomen) de 12 a 15 milímetros. Su abdomen es globuloso, de 7.2 a 9.6 mm. de diámetro. Incluyendo las patas su envergadura total es de 38 a 43 mms. Pesa de 120 a 400 mg.. Por su parte, el macho es más pequeño. Puede medir entre 2.9 a 5.1 mm y pesa entre 8 y 18 mg.

Lo que distingue a estas arañas es una mancha roja en forma de reloj de arena en el abdomen. Esta puede variar levemente de forma y rara vez está.

Estas arañas se reproducen por huevos que la hembra deposita en su ooteca o nido(puede construir hasta tres), que construye en 1 a 3 horas. La ooteca mide 9.5 mm. de diámetro y contiene en promedio 185 huevos. La incubación dura entre 14 y 30 días. La hembra alcanza su madurez entre los 112 y 140 días de vida, luego de 6 a 8 mudas. El macho, por su parte, madura en 54 a 88 días luego de 4 a 7 mudas. El promedio de vida aproximado del macho son 200 días y el de la hembra 900 días. 

El macho en general vive poco tiempo luego de la fecundación, siendo generalmente devorado por la hembra, de ahí el nombre popular de "viuda negra". Estas arañas pueden vivir hasta 200 días sin alimentarse.

A diferencia de la "araña del rincón", la "araña del trigo" tiene un hábitat fuera de las viviendas, principalmente en campos de cultivo de trigo, alfalfa y lino, habita en diferentes especies vegetales, troncos y árboles, bajo rocas y piedras en áreas silvestres, ocasionalmente puede habitar jardines de viviendas. Se alimenta preferentemente de ortópteros y coleópteros, y en forma ocasional de otros insectos.

Por su hábitat, el grupo de mayor riesgo son los trabajadores de faenas agrícolas, siendo más frecuente la mordedura en hombres (85 %). La mayoría de los accidentes (95%) ocurre entre las 10 de la mañana y las 7 de la tarde. Las edades de los pacientes se encuentran entre la segunda y cuarta década de la vida. Los meses con mayor riesgo de accidente por orden de frecuencia son: enero ( 52 %), febrero ( 19 %), diciembre ( 17 %) y marzo (10%).

La glándulas venenosas se encuentran en el cefalotórax y se comunican con los quelíceros o dientes inoculadores a través de conductos. Los machos poseen un aparato venenoso inadecuado para morder a un vertebrado, por lo tanto, son inofensivos para el ser humano. Su veneno es una potente neurotoxina, es decir, actúa a nivel de los nervios.

Su último mecanismo de acción todavía no está totalmente comprendido, sin embargo, aparentemente proteínas específicas que actúan en las neuronas (células nerviosas) produciendo liberación no controlada de las sustancias estimuladoras naturales (neurotransmisores).

La mordedura de esta araña no siempre es percibida por el afectado. Se produce leve aumento de volumen y coloración rojiza de la zona. En general se observan dos pequeñas manchas rojas que indican el sitio de la mordedura. Aproximadamente, media hora después del evento, comienza el dolor alrededor del área y que comienza a irradiarse a distancia.

Posteriormente, comienzan calambres musculares en la zona, que con el tiempo se tornan generalizados en todo el cuerpo. 

El dolor puede ir en aumento, la persona está intranquila y con respiración dificultosa. Aumenta la temperatura, hay taquicardia e hipertensión, arritmias, dolor del pecho, sudoración profusa y dolores abdominales. En los casos mortales estos síntomas van en aumento, llegando a producirse una despolarización muscular generalizada y compromiso respiratorio.

El tratamiento es en general de soporte. Los casos leves requieren principalmente hidratación, analgésicos y observación. Los casos graves requieren algunas drogas específicas y muchas veces ventilación mecánica.

 

Fuente: www.inia.cl , www.saludactual.cl 

www.portalfruticola.com

Suscríbete a nuestro Newsletter