Columna: Bayas Sanas, Nutrición Equilibrada
Por Ian Carlo Bottinelli, Asesor en Nutrición Vegetal
Nos acercamos o ya nos encontramos a uno de los estados de desarrollo más importantes para cualquier productor de uva de mesa que espera conseguir un gran rendimiento con fruta de alta calidad. Es así, como la fase de Crecimiento de Frutos que llega hasta cierre de racimos es un momento crítico para realizar los últimos ajustes en el plan de fertilización base del cuartel y/o apoyo con correcciones foliares.
La fase inicial de crecimiento de la baya se caracteriza por ser la de máxima división celular del fruto; en este momento la planta requiere alta energía metabólica, un equilibrio hormonal ideal, los correctos equilibrios nutricionales para que la baya en formación termine esta fase como un órgano con el máximo número de células que otorguen resistencia física y una capacidad de generar los metabolitos secundarios que van a dar color a la fruta.
Particularmente nos referiremos al Balance Nutricional esperado para este fase en un parrón de alta producción que busca conseguir fruta de calibre, altamente resistente a partidura, desordenes fisiológicos y obviamente mayor resistencia a presión de hongos de racimo.
En este esquema es casi mandatorio el monitorear los equilibrios y relaciones entre los principales cationes (Potasio, Calcio, Magnesio) y las formas Nitrogenadas disponibles en la planta o que estamos suministrando. Es sabida la importancia de los cationes, pero no siempre está internalizado que la mayor demanda de Calcio está dada en esta época para luego decrecer hacia pinta. Por el contrario, la mayor demanda de Potasio (peak de requerimiento) se encuentra en promedio hacia cierre de racimos. En el caso de Magnesio, la demanda es menor, con requerimientos más bajos, pero no menos importantes. Así y todo la demanda total de cationes (K + Ca + Mg) entre fruto cuajado y pinta llega a ser 3-4 veces mayor que la demanda de Nitrógeno.
Es altamente frecuente encontrar programas de fertirriego en parrones productivos donde en esta época el foco es en Nitrógeno, Potasio y un poco de Calcio, obviando las aplicaciones de Magnesio o solo destinando un par de correcciones foliares “cosméticas”. Es recomendable mantener un aporte basal Magnesio hasta pinta de al menos un 20% del aporte semanal en unidades de Calcio.
Respecto al Nitrógeno, es crítico el control del abonado de manera precisa ya que excesos de nitrógeno desencadenarán en vigor excesivo y potencialmente problemas fisiológicos hacia cierre de racimos-pinta los cuales a esa altura ya son casi imposibles de corregir. Así también se recomienda mantener un cierto equilibrio de las formas nitrogenadas en la planta, se habla de relaciones de 5:1 en el aporte de Nitratos v/s Amonio.
Frecuente es observar visualmente en pinta parrones de Thompsom o Crimson Seedless con la siguiente situación: Alto vigor, bayas y racimos de buen tamaño, riegos largos, faenas de apertura de ventanas, inicios de síntomas visuales de Palo Negro e incertidumbre respecto al proceso de inducción de color.
En estos mismos casos, es usual encontrar a nivel nutricional: altos niveles de nitrógeno (nitrato o amonio), igual concentración de calcio y potasio, bajos niveles de magnesio y muy bajos niveles de Zn, B y Mn. Condiciones sobre las cuales el proceso de maduración se verá claramente afectado, no lográndose al 100% el objetivo inicial trazado.
Esta es la época de los análisis foliares, análisis de peciolo o análisis de savia. El objetivo es claro: chequear lo que la planta está realmente absorbiendo de nuestro plan de fertilización, definiéndose que está en exceso y que está en déficit.
Particularmente hemos realizado Análisis de Savia en parrones productivos, herramienta interesante de evaluar, ya que en menos de 72 hrs. entrega resultados con bastante buena precisión, los cuales nos permiten ajustar raídamente el plan de fertiriego. Las concentraciones de los diferentes elementos detectadas en la savia de parrones equilibrados y de historial de buena fruta, en fruto de 10mm son:
Nitrógeno total 1300-1500ppm, Potasio 2000 ppm, Calcio 3000-3800 ppm y Magnesio 800 a 1000 ppm.
El momento es clave y las decisiones deben ser tomadas a tiempo, si consideramos que la pinta comienza el 20 de Enero aún es tiempo de dar vuelta los dados.