Argentina: Fumigación aérea arrasó con dos hectáreas de cultivos
Un pequeño productor metanense denunció que una fumigación aérea realizada en una finca colindante con su propiedad arrasó con más de 150 plantas de mandarinos, naranjos, paltas y otras especies que se encontraban en plena producción, provocando un daño irreparable.
Se trata de Néstor Alberto Lombardi, de 80 años, quien posee una finca en el paraje El Tajamar, a unos 10 kilómetros al este de San José de Metán.
“Esta es la tercera vez que ocurre lo mismo, pero en esta ocasión decidí iniciar las acciones legales correspondientes por las pérdidas irreversibles que han ocasionado a los cultivos que son el resultado de 37 años de trabajo”, dijo Lombardi a El Tribuno.
El productor radicó una denuncia en la Comisaría 30 de Metán en la que expresó que el daño fue provocado por un avión fumigador cuyo piloto incurrió en una grave negligencia porque debido a los efectos del viento el herbicida que estaba aplicando afectó a las plantaciones de dos hectáreas de su propiedad.
Lombardi acusó de los lamentables acontecimientos a un productor vecino de El Tajamar, que también reside en Metán, pero se supo que la finca colindante actualmente se encuentra arrendada a terceros.
“Además del perjuicio a mis cultivos tuve que padecer nauseas y mareos luego de la fumigación irresponsable que realizaron porque también dañaron el medio ambiente”, destacó Lombardi.
Un informe
Lombardi requirió los servicios del ingeniero agrónomo Ernesto Oscar González, quien realizó un peritaje y comprobó los daños. Además el productor recorrió la finca con el juez de Paz de Metán, Walter Ferreyra, quien labró un acta.
El ingeniero González en su informe destacó que el problema fue originado por deriva en la aplicación de agroquímicos, específicamente Gramoxone, principio activo Paraquat, que se usa como desecante. El productor vecino lo había utilizado sobre el cultivo de garbanzo, para poder cosecharlo.
En el peritaje el profesional estableció que la aplicación se realizó con una avioneta el 28 de octubre pasado y afectó a más de cien plantas de mandarinos y naranjos en plena producción y de varios años de implantado. Además de más de 40 plantas de palta, dos durazneros, seis chirimoyas y cuatro plantas de “mato”.
“Los efectos sobre las plantas son de intensa defoliación o caída de hojas y pérdida de yemas”, destacó González en su informe.
El profesional concluyó que se va a ver afectada la producción de los años siguientes con menos calidad y cantidad y que incluso pueden llegar a morir algunas de las especies, según el grado de afectación.
“El efecto también se observa en malezas y cultivo de hortalizas que posee el propietario como zapallitos y maíz para choclos”, destacó González en el peritaje.
EL DATO
Las plantas frutales afectadas por el agroquímico van a necesitar dos años como mínimo para reponerse. El 20 o 30% podrían morir.
Fuente: Eltribuno.info