Emek, Shani-Yonay y Kamel llegaron para revolucionar el mercado.

Sus nombres: Emek, Shani-Yonay y Kamel. Tres variedades de granadas tempranas que prometen y por las cuales, Subsole ha  hecho una gran apuesta para prolongar, mejorar y consolidar la industria de granadas chilenas, dominada hasta ahora por la Wonderful, una fruta de maduración tardía.

Emek, Shani-Yonay y Kamel son de origen israelí, territorio donde la granada es una fruta tradicional y de alto consumo en los mercados de Medio Oriente. En Israel el mejoramiento genético de la granada ha tomado gran fuerza, en una tarea que ha sido liderada por el instituto de investigación agrícola Volcani Center.

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Claudio Sarah, gerente comercial de Subsole, explica que la entrega de la licencia para el cultivo de estas variedades será controlada y entregada a aquellos productores que demuestren responsabilidad y cuidado en su cultivo: “Es importante tener volumen pero más adelante. Primero nos enfocaremos en la calidad”.

Shany-Yonay

Las plantas están siendo comercializadas por la empresa Viverosur, la cual junto a Subsole y el Vulcani Center asumen la responsabilidad en Chile de asegurar que la producción de estas tres variedades se realice bajo estrictos controles. Esto con el objetivo de resguardar la superficie cultivada, su calidad y con ello, lograr una buena rentabilidad para el productor.

Alejandro Navarro, gerente general de Viverosur comenta que “de esta manera se genera un grupo de nuevas variedades de granadas que potenciará la producción de la fruta bajo sólidos criterios de calidad, diferenciándose de las disparidades que presenta  la variedad Wonderful, debido a su gran variabilidad genética”.

En este esfuerzo de Subsole como socio fundador, otras empresas como Dole Chile, Agricola Garcés, Agrícola Plaza Vieja y recientemente la exportadora de berries Valle Maule han comprometido la plantación de importantes superficies en los próximos años.

“Se trata de una iniciativa de largo plazo que permitirá mejorar no sólo la oferta sino también consolidar la presencia chilena en los mercados internacionales, asegurando mejores precios a través de una transición entre estas variedades tempranas y la Wonderful, como fruta tardía”,  asegura Miguel Allamand, presidente de Subsole. La apuesta de la empresa apunta también a la apertura de nuevos mercados.

Emek, Shani-Yonay y Kamel se caracterizan por poseer buen sabor, arilos de color y consistencia atractivas y una piel de color rojo parejo durante todas sus etapas productivas, lo que le entrega –a diferencia de la Wonderful– una mejor protección al golpe de sol. Estas características las hacen particularmente atractivas en los mercados y la superficie plantada en Israel ha aumentado significativamente, una vez que ellas estuvieron disponibles para los productores de ese país.

Atendiendo necesidades del mercado

“El mercado quiere fruta temprana y roja” –asegura Claudio Sarah– “y hoy lo más temprano que tenemos es en Copiapó, donde la cosecha comienza en marzo”.

Las variedades tempranas permiten comenzar la cosecha entre un mes y medio y dos meses antes que la Wonderful, comenzando con la variedad Emek. Esto generará diversos beneficios como la posibilidad de llegar con fruta de buena calidad a los mercados cuando existe una reducida oferta de granadas en ellos. Desde el punto de vista productivo, permitirá escapar de las adversas condiciones climáticas de fines de verano, ya que la granada es una fruta muy sensible a la lluvia.

“Como cualquier fruta temprana su distribución de calibres de Emek y Shani-Yonay es más reducido y su máximo potencial productivo menor que las variedades más tardías, no así Kamel que es como Wonderful”, explica la ingeniera agrónoma de Subsole, Constanza Hojas.

Para exportación en promedio se embala cerca de un 50% de Wonderful, volumen del cual hay fruta Cat 1 y Cat 2 mientras que en el caso de las variedades tempranas, se espera exportar alrededor de un 70% de la fruta.

En Subsole proyectan que para 2015 ya debiese haber fruta comercializable. Las primeas plantaciones se realizarán esta primavera en Vicuña, Ovalle y Copiapó, comenzando con alrededor de 40 ha.

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