México: Migración michoacana a EE.UU, a la baja

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México: Migración michoacana a EE.UU, a la baja

Tres factores han sido determinantes con la baja de la migración hacia Estados Unidos, pero desafortunadamente ninguno de ellos tiene que ver con un mejora en la calidad de vida de los mexicanos y aunque Michoacán sigue siendo el primer receptor de remesas tras recibir más de dos mil millones de dólares en 2010, pero sin recuperar el volumen de otros años.

Tales factores son la recesión económica que afecta a Estados Unidos, una mayor presencia del crimen organizado en la migración y una mayor vigilancia de la frontera, que ha resultado efectiva en enviar a los connacionales por rutas cada vez más peligrosas o complejas.

Ante la falta de oportunidades que ha creado la recesión en el vecino del norte y que también ha tenido repercusiones en México, la situación es complicada pues ya ninguno de los dos países genera la cantidad de empleos que demanda la población, por lo que la migración interna comienza a convertirse en un nuevo fenómeno.

En tanto que en Estados Unidos los connacionales deben moverse hacia otros estados donde las legislaciones o la sociedad sean menos hostiles hacia los migrantes, en México e incluso al interior de Michoacán, hay quienes deben moverse hacia los puntos o centros urbanos donde consideran que puede haber más oportunidades.

En ambos casos las opciones son por lo general temporales, mientras que en Estados Unidos el moverse hacia estados donde hay poca presencia de otros migrantes, hace más complicada su estadía por la falta de redes sociales, en México hay quienes se mueven constantemente de un lugar a otro ya sea porque los trabajos son por poco tiempo o de plano no los hay.

Es así que para el especialista en temas migratorios, Carlos Enrique Tapia, considera que un futuro la academia deberá enfocarse en la migración interna que en la que se dirige a Estados Unidos, pues considera que en los próximos cinco años esta opción quedará cerrada para la mayoría de los michoacanos, aunque no duda que las poblaciones con mayor tradición puedan mantenerla.

La última década

Hace una década Michoacán se ubicaba como el segundo estado con mayor número de municipios con Alta y Muy Alta Intensidad Migratoria ya que prácticamente cuatro de cada diez municipios michoacanos se encontraban en este punto. En primer lugar se ubicó Jalisco con más del 50 por ciento, mientras que Guanajuato en el tercer puesto con el 30 por ciento de sus municipios.

Así mismo, en el 2000 el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) estimó que en total 165 mil 502 habitantes se habían marchado de la entidad para irse a otro país, lo que representa un promedio de 42 migrantes por cada mil michoacanos, un número elevado comparado con el promedio nacional que es de 16 por cada mil.

En ese mismo año se calculó que fueron 170 mil los jaliscienses que partieron al extranjero (27 de cada mil) y 163 mil los guanajuatenses (35 de cada mil).

Para 2010 el aumento de la expulsión de michoacanos al extranjero fue mayor, pero por debajo tanto de Jalisco como de Guanajuato, pues se estima que poco más de 85 mil michoacanos partieron al extranjero, el 98 por ciento (83 mil 471) hacia Estados Unidos, mientras que Guanajuato expulsó cerca de 120 mil persona y Jalisco más de 86 mil.

La década pasada marcó una diferencia en la situación de los migrantes michoacanos, pues a decir de Enrique Tapia muchos de los migrantes que partieron hace diez años son personas que llevan ese tiempo sin poder regresar al estado, mientras que años antes era común que los michoacanos en el país del norte regresaran regularmente, los que partieron en la última década se han encontrado con un escenario más adverso.

“Los de los últimos diez años, ahí están en Estados Unidos de manera indocumentada, son quienes prácticamente no han regresado a México en esos diez años y son gente cuya situación en ese país, en términos legales va a depender de la política migratoria estadounidense, que es un tema que su sociedad ve como algo que les compete únicamente a Estados Unidos”.

Pero la situación es aún peor para quienes se marcharon en los últimos cinco años, pues estos migrantes lograron cruzar, pero han sido los que han sufrido las deportaciones que en ese mismo lapso de tiempo han ido en aumento exponencial.

Basándose en la situación por la que atraviesan actualmente los inmigrantes mexicanos en el país del norte, así como sumando algunos elementos adicionales, es que el analista se atreve a aseverar que en los próximos cinco años la opción de migrar hacia Estados Unidos dejará de ser viable para la mayoría de los mexicanos.

Principales trabas para la migración

De acuerdo con Enrique Tapia, el último censo, en el cual se comprobó que no existía un despoblamiento de la entidad, mostró que hay una tendencia a la reducción de la migración hacia Estados Unidos, algo que desde 2007 ya se había percibido en aquel país.

Para el analista esta reducción de la migración internacional se debe a diversos factores que poco tienen que ver con mejores condiciones a nivel nacional, la principal más bien se encuentra relacionada con la situación de la economía estadounidense que se encuentra lejos de salir de la recesión en la que se encuentra.

La segunda causa que señaló fue el hecho de que cada vez es más peligroso pues la migración se ha vuelto a últimas fechas un tema en el que el crimen organizado también ha intervenido; finalmente en tercer lugar señaló que el aumento en la vigilancia de la frontera si ha surtido efecto y actualmente el paso a ese país se realiza por rutas más peligrosas.

Otro especialista en temas migratorios, Miguel Moctezuma Longoria, en una visita a esta capital también señaló que la crisis económica en el vecino del norte ha tenido consecuencias dramáticas para los migrantes mexicanos, por lo que aseguró que en los últimos meses se han presentado casos en lo que sus parientes en México han tenido que enviarles dinero para sobrevivir.

En ese mismo sentido, el economista Arturo Huerta González visitó esta capital para hablar sobre la crisis económica de Estados Unidos, la cual estimó está lejos de ver fin y por el contrario, señaló que cada vez son más las voces que vaticinan que la recesión de este país apunta a durar más tiempo de lo que se esperaba.

Huerta González aseguró que la única salida es “generar condiciones de crecimiento interno, que haya empleo interno bien remunerado, para evitar el rompimiento de familias, para que la gente deje de migrar a Estados Unidos en busca de oportunidades que México no ofrece”, pero que ya tampoco el vecino tiene ya la capacidad de ofrecer.

Inseguridad y vigilancia más estricta

Con respecto al segundo obstáculo para la migración señalado previamente, el de la inseguridad, Enrique Tapia señaló que actualmente hay muchas extorciones y secuestros que tienden a agravarse y parecen no tener una solución en el corto plazo, pues la corrupción y la delincuencia se han vuelto un tema cada vez más difícil.

“Nosotros escuchamos el caso de las famosas narcofosas desde el año pasado, que básicamente son de transmigrantes, centroamericanos o gente que viene del sur, pero también sabemos casos de autobuses que se han perdido o gente que no aparece, que son mexicanos”, por lo que señaló que los connacionales no están exentos de esta amenaza.

Finalmente con respecto al tema de la vigilancia que hay en la frontera norte, señaló que si ha dado resultados, pues con la construcción del muro y el aumento de efectivos y recursos dedicados a la vigilancia fronteriza, han ocasionado que solamente hay dos opciones para el cruce de migrantes: el mar y el desierto.

“Esto ha vuelto mucho más difícil y riesgoso el cruce. Entre el año pasado y el presente han aumentado las detenciones de mexicanos que quieren cruzar por mar, ya sea por el Golfo de México o por el Pacífico”, explicó.

Todo ello ha traído como consecuencia que cada vez menos michoacanos tengan intensiones de pasar hacia Estados Unidos, pues con las complicaciones, los costos de ello también han aumentado de forma notable, por ello el analista asegura que ahora el movimiento migratorio se han mantenido en el interior del país o del estado, lo que podría explicar el despoblamiento de algunos municipios de la entidad.

La tradición fortalece

Para Carlos Enrique Tapia, los migrantes que provienen de municipios con mayor tradición migratoria, que en algunos casos data ya de un siglo de historia, son los que mantendrán sus movimiento hacia el norte, pues además de contar con redes sociales que les resultan provechosas, se sienten más confiados n su paso de ida o vuelta.

Es así que prácticamente los municipios del norte del país, que muestran una mayor intensidad migratoria, mantendrán su flujo hacia Estados Unidos sin mayor dificultad, mientras que para el resto de los migrantes la situación se ha vuelto y se volverá más compleja, por lo que estima que en los próximos cinco años tendrán que buscar otra opción.

Los últimos cinco han sido una muestra de ello, pues como comenta el analista, quienes no cuentan el respaldo de la comunidad y familia en aquel país, han tenido que moverse de un estado hacia otros con menor presencia de mexicanos, lo que hace más complicada su estadía y que los ha hecho víctima de la reciente ola de deportaciones.

El cruce con papeles falsos

Una vertiente que es común para el paso de México a Estados Unidos entre aquellas personas que provienen de zonas con una elevada tradición migratoria es la de utilizar los papeles de otra persona o en algunos casos, inclusive falsos.

El analista advierte que esta modalidad se ha tornado más riesgosa en los últimos años, pues el ser atrapado con documentación falsa es un delito que se ha convertido en algo grave cuando hay reincidencia. “La primera vez solamente son deportados, pero en la segunda ocasión debe enfrentar un juicio y de haber una tercera, hay encarcelamiento inmediato.

“Hay datos que señalan que muchos de los mexicanos que se encuentran en Estados Unidos esperando un juicio en este momento, es porque los atraparon con documentos falsos”, delito por el que pueden pasar hasta cinco años en la cárcel.

La tendencia actual

La migración es una manifestación de la falta de oportunidades que ofrece un determinado espacio geográfico, por ello, mientras la situación económica nacional y estatal sean precarias, la migración va a seguirse dando y si se cierran unas puertas, otras se tendrán que explorar, tal es el caso de la entidad, donde se ha registrado un aumento en el jornalerismo.

A decir del especialista en temas de migración, los jornaleros agrícolas que se en la actualidad se han vuelto nómadas que se mueven por distintas regiones del estado, se componen básicamente de dos tipos de personas, quienes ya estuvieron en Estados Unidos y no encontraron oportunidades y quienes ni siquiera tuvieron esa posibilidad por los altos costos que implica.

Los segundos se puede decir que provienen de una capa mucho más empobrecida y que normalmente se mueven de un municipio a otro en busca de oportunidades de trabajo y que en pocas veces se han quedado a engrosar los llamados cinturones de miseria, estos son el mayor número y las personas que el mismo investigador ha llegado a encontrar.

En segundo lugar ha encontrado gente que en algún momento tuvieron la oportunidad de irse a Estados Unidos, pero que por las actuales condiciones ya no les fue posible y han tenido que optar por el movimiento interno, por lo que no descarta que haya personas que en algún momento hayan podido ir al país del norte, pero que ya no pueden regresar.

Lejana la reforma migratoria

A decir de Enrique Tapia, la posibilidad de que se lleve a cabo una reforma migratoria en estos momentos es algo muy complicado, pues los estadounidenses consideran en general que ese es un tema que solamente les compete a ellos y que nadie más puede inmiscuirse en ello, cuando en realidad es un problema binacional.

“Ahí hay un problema que tiene que ver con la relación bilateral de los países y no es un problema simple y llanamente diplomático, creo que es una situación que el gobierno de México no ha sabido encarar para decirle al gobierno estadounidense: el problema migratorio es bilateral, de comercio , economía, pero también humanitario y de derechos”.

Por ello estimó que mientras México no plantee así el problema, Estados Unidos lo va a seguir viendo como un problema interno que es la percepción que abunda entre los legisladores y senadores estadounidenses y que particularmente los del partido republicano no piensan solucionar a través de una reforma.

El problema, a decir del investigador, radica en que no es una prioridad para el gobierno de Barack Obama, pues ya dijo que lo ha dejado en manos de los legisladores de la cámara baja, quienes en su mayoría son republicanos.

Remesas a la baja

Durante 2010, Michoacán mantuvo el liderazgo en la recepción de remesas, a pesar de que no es el estado que más personas expulse hacia el país del norte, en total se recibieron dos mil 141 millones de dólares, que si bien significaron una recuperación frente a la caída de 2009, cuando se captaron dos mil 59 millones de dólares.

De cualquier forma 2010 fue un resultado a la baja después de que en 2008 se captaron dos mil 448.2 millones de dólares, un poco más que en 2007 cuando la cifra llegó a los dos mil 435 millones de dólares.

2006 fue el año que representó la recepción más alta de divisas, cuando Michoacán recibió dos mil 503.7 millones de dólares, desde ese entonces la tendencia ha sido a la baja, pues entre 2003 y 2005 los montos fueron en aumento al pasar de mil 787 millones a dos mil 281 millones y finalmente, a dos mil 442 millones de dólares.

Michoacán se encuentre entre los dos estados que tienen una mayor dependencia de estos recursos, ya que representan poco más del once por ciento de sus Producto Interno Bruto, mientras que para Zacatecas, las remesas representan el 11.43 por ciento.

Fuente: Cambio de Michoacán

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