El corte podría volver dentro de una semana.

Después de varios días de bloqueo total para camiones y ómnibus de larga distancia, se reactivó ayer el paso internacional en la frontera con Paraguay, entre Clorinda y Puerto Falcón, y entre Puerto Pilcomayo e Itá Enramada, poniendo fin al tenso clima generado por las largas colas de vehículos y las protestas airadas.

Sin embargo, se fijó un plazo de una semana para que se encuentre una solución final al conflicto y, en caso de que eso no ocurra, volverá el corte en la ruta 11, según advirtieron los comerciantes.

El origen de la protesta fue el reclamo de comerciantes, taxifleteros y otros trabajadores informales, como los estibadores, contra las medidas restrictivas impuestas por Paraguay para el ingreso de hortalizas y frutas argentinas.

Ahora se fijó una semana de plazo para que se realicen gestiones entre la municipalidad de Clorinda, el gobierno de Formosa y el gobierno nacional, tendientes a introducir cambios en la propuesta de empadronamiento en el Sistema Operador Fronterizo Autorizada (SOFA), que formuló la AFIP-DGA .

En la Cámara de Comercio e Industria clorindense se considera que el SOFA somete al operador comercial a un régimen de cupos, controles y sanciones "propios de un régimen de facto".

Los comerciantes anticiparon que cuando expire ese plazo, si ven que no existen respuestas satisfactorias a sus reclamos, regresarán al corte de la ruta 11, en la frontera con Paraguay. Consideran que la zona aduanera especial establecida por la AFIP perjudica el comercio de la ciudad, porque implica que comercializa ciertos productos con cupos. Según sostienen, si se pretende comercializar con Paraguay, no puede haber restricciones.

Los cupos rigen para mercaderías como carne, arroz, cebolla, harina, aceite, azúcar y maíz.

Silvio Ortiz, representante gremial de los camioneros, informó que se había aceptado una propuesta transmitida por el canciller guaraní al embajador argentino en el Paraguay, Rafael Romá, con medidas de flexibilización respecto de los puntos de ingreso de mercaderías, aunque no respecto del control sanitario.

Fuente: La Nación